Polémica con los test rápido de anticuerpos que están empezando a vender las farmacias. Lo que algunas personas ven como el salvoconducto ideal para pasar las Navidades con sus familiares, los científicos creen, con la evidencia, que no son las pruebas apropiadas para que una persona sepa si está contagiado por la covid-19, con el riesgo que puede suponer si, después de hacérselo, se reúne con sus seres queridos y los infecta.
En este sentido se ha pronunciado el presidente del Colegio de Farmacéuticos de Cádiz, Ernesto Cervilla, quien ha manifestado en el Diario de Cádiz que esos tests tienen "muy poca utilidad" y que "no dan seguridad ninguna para aquellas personas que quieren irse a cenar tranquilos con los abuelos en estas fiestas. No da seguridad ninguna", ha expresado en el citado medio.
Además, según explica el propio Cervilla, las farmacias no están autorizadas a realizar estos tests dentro de sus establecimientos, por lo que son los propios clientes los que se lo tienen que hacer en casa. "Una mala interpretación puede tener consecuencias desagradables, sobre todo en estas fechas", comenta el especialista, haciendo referencia a que un resultado mal interpretado por una persona no experta puede dar lugar a más infecciones en lugar de evitarlas.
La Dirección General de Salud Pública de la Comunidad de Madrid se ha visto obligada a publicar una nota técnica "ante la comercialización de pruebas de detección rápida de anticuerpos" para aclarar determinados aspectos sobre este tipo de pruebas.
En concreto, la Comunidad de Madrid informa de que, en general, "NO sirven para detectar infección activa por SARS-CoV-2 y por tanto no deben ser utilizadas con este fin ni en personas con síntomas ni en individuos asintomáticos", y tienen una menor fiabilidad que las pruebas que se realizan en los laboratorios (ELISA/CLIA) y un mayor porcentaje de falsos positivos y falsos negativos, "por lo que son difíciles de interpretar".
Del mismo modo, Osatzen recomienda en una nota publicada en sus redes sociales "NO HACERSE LA PRUEBA", y justifica su postura en que la prueba de la que se habla "no mide si se tiene el virus (como mide la PCR o el test de antígenos), mide si se tienen unas proteínas ("defensas") de las que no nos informa la cantidad, la cualidad ni la duración y este tipo de test es menos fiable (da más errores) que los que se realizan en el laboratorio)".