El cáncer de próstata es uno de los tumores malignos más comunes entre los hombres. La Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), en su informe anual acerca del cáncer, estimó que durante este año habría 35.126 nuevos casos de cáncer de próstata, posicionándolo entre los tumores más frecuentes y alcanzando los 106.941 casos en el año 2018. El 60 % de estos casos, además, aparecen en hombres mayores de 65 años, destaca la SEOM. Ahora, un test genómico podría predecir las probabilidades de metástasis y muerte, así como la patología favorable.
A través de Oncotype DX Genomic Prostate Score, que ha sido llevado a cabo por Exact Sciences, los pacientes pueden tomar ciertas decisiones de tratamiento desde el momento de diagnóstico. Sirve para hombres con cáncer de riesgo muy bajo, bajo e intermedio. A través de cierto método, ayuda a identificar qué pacientes deben recibir tratamiento inmediato así como cuáles pueden seguir bajo vigilancia activa. Y con ello, determinar y acotar el pronóstico sin necesidad de esperar a una consulta con el médico. "La forma más eficaz para lograr curar el cáncer de próstata es la detección precoz", que en cierta forma se ve posibilitado por estos tests, aduce Ruibal.
Este método se tiene muy en cuenta en sus clínicas de Pontevedra y Sevilla, desde donde se ha ido probando su eficacia. Allí se ha comprobado que tienen un doble efecto: por un lado, la detección anticipada de posibles complicaciones. Por otro, la descongestión hospitalaria en un momento ciertamente complicado para los centros sanitarios, muchos de ellos sufriendo las consecuencias del colapso de pacientes debido a la COVID-19.
Estas herramientas, por tanto, "nos ayudan a definir el mejor plan de tratamiento, así como a orientar en la toma de decisiones a cada paciente", argumenta el urólogo. Los GPS son críticos para el tratamiento de pacientes Gleason 3+3 (GG1) y Gleason3+4 (GG2). La escala Gleason es el sistema utilizado para medir el grado de agresividad de un cáncer de próstata. Estos tests establecen cierta información que clarifica el diagnóstico a través los genes representativos de las cuatro vías específicas del cáncer. En España, se comercializan a través de Palex Medical.
Son, además, seguros y fiables. Están incluidos en las directrices de guías urológicas americanas como una opción de prueba molecular a tener en cuenta en los pacientes de distintos grados de incidencia del tumor, tanto en el muy bajo como en el bajo y medio. Además de la certificación americana, cuenta con el aval de las guías europeas desde el año 2018 como "el único test que permite determinar la agresividad del tumor". Le respaldan, a su vez, numerosos estudios de desarrollo, validación e impacto clínico.
En un momento en el que las listas de espera se eternizan debido a la incidencia de la COVID-19 y conseguir una cita puede ser cosa de semanas, estos tests pueden significar una diferencia importante a la hora de determinar la gravedad de una forma precoz y, dependiendo del resultado, continuar con el tratamiento ordinario o modificarlo. Con ello, se permite personalizar los tratamientos y acotar cada vez más sin esperar a las largas colas que se están generando en el ámbito sanitario.