Natural o colorante: ¿de dónde viene el amarillo de los pollos de corral?
Al estar en el supermercado alguna vez nos hemos preguntado por qué unas pechugas de pollo son más rosas y otras más amarillentas
Comúnmente se asocia ese color amarillo o naranja al pollo de corral, pero lo cierto es que nada tiene que ver
Que un ave tome esa tonalidad es consecuencia de algunos colorantes o pigmentos naturales que se encuentran en su alimentación
Pasar por la carnicería o la zona de neveras del supermercado para comprar unas pechugas de pollo es algo más que habitual cada día por la cantidad de recetas que podemos hacer con ellas. Y cuando estamos ahí, pensando en cuál elegir, se nos viene a la mente esos vídeos o documentales de los pollos encerrados en jaulas, apelotonados, que tanta pena nos ha dado. Entre los filetes más claros, rosas, y los que tienen un color amarillento o anaranjado decidimos quedarnos con estos últimos porque los asociamos a los de corral, pollos que han tenido una vida, supuestamente, mejor y una alimentación más cuidada. Pero, ¿es esto cierto?
La clave: su alimentación
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Pues realmente la tonalidad viene dada por su alimentación, no por el espacio que han tenido en el corral o la felicidad y libertad en su vida. Bien, pues cuando la piel y la carne del pollo se torna en esos tonos amarillos se debe a que ha tenido una dieta alta en maíz que ha hecho que su pigmento se adhiera a la piel y coja ese color. Incluso el científico José Miguel Mulet declaró al diario El País que para dar un toque más anaranjado, a veces se les añade en la alimentación caxantina, un pigmento rojo que se encuentra en algunas algas y hongos y actúa como colorante.
Pero, ¿es tan fácil que solo con el maíz el pollo coja esa tonalidad? Lo cierto es que hay un proceso químico detrás, ya que los carotenoides, unos pigmentos que tienen el maíz o las zanahorias, se disuelven en la grasa. Entonces, al comerlo el animal, estos se distribuyen por el cuerpo y se quedan en la grasa subcutánea dándole ese color que tanto nos llama a comprarlo en el supermercado. Y no solo afecta a la piel, también hace que la yema de un huevo
Medidas para considerarlo de corral
Medidas para considerarlo de corral
Así que ya ves, no por su color el pollo será o no de corral, solo podemos advertir qué en su alimentación ha habido algún que otro producto que ha favorecido que coja esa tonalidad. La Comisión Europea tiene un reglamento que regula la comercialización de las aves, entre ellas los pollos, para que se puedan clasificar como de corral en el etiquetado.
Para ello, entre otras medidas, es necesario que el grado de concentración por metro cuadrado no supere los 15 pollos y tampoco los 25 kilos en peso vivo y, además, solo pueden sacrificarse una vez cumplidos los 56 días o más.
Por su lado, al menos en la mitad de su vida, los pollos deben poder tener acceso a una zona con vegetación al aire libre, con al menos un metro cuadrado por ave. En cuanto a la alimentación, en la fase de engorde, se les debe aportar, como mínimo, un 70% de cereales.
Asimismo, cuando quiera llevar la clasificación de 'Granja al aire libre' no se podrá tener una concentración mayor de 12 pollos por metro cuadrado y los centros de producción no pueden ser mayores de 1.600 metros cuadrados, como máximo con 4.800 pollos. A su vez, a partir de las seis semanas los pollos deben tener acceso continuo a lo largo del día a un espacio al aire libre. Y algo importante, los pollos deben estar reconocidos como aves de crecimiento lento y no se les pueda sacrificar antes de los 81 días de vida.
Pero una clasificación superior, la de 'Granja de cría en libertad', que requiere de los mismos requisitos que la anterior pero con un punto de diferencia, pues los pollos tendrán acceso continuo durante el día a espacios al aire libre con una superficie ilimitada.