Debaten los nutricionistas: ¿qué es más sano, el vino o la cerveza?
El vino y la cerveza son las dos bebidas alcohólicas más consumidas en nuestro país
Si las comparamos nutricionalmente, ¿cuál es una mejor opción?
Varios nutricionistas nos dan su opinión y recomiendan consumirlas solo ocasionalmente
Son las dos bebidas preferidas de los españoles. Las que acompañan las comidas, las tardes con amigos, las celebraciones e incluso los momentos de desconexión en el hogar. Cada ciudadano toma de media 50 litros de cerveza al año, de acuerdo con el estudio "Compra y Consumo de Cervezas en España" y unos 24 litros de vino, según la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV), y tanto una como otra son dos de las bebidas alcohólicas que más se consumen a nivel mundial.
Históricamente se ha pensado que una copa de vino al día reduce el riesgo de enfermedades cardiacas, que forma parte de la dieta mediterránea e incluso que puede ser beneficiosa para la salud, pero los expertos no se ponen de acuerdo en esta recomendación. ¿Pero qué pasa si lo comparamos con el zumo de cebada? Hablamos con nutricionistas para que nos den su opinión. ¿Es más sano el vino o la cerveza?
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No te engañes, lo más sano es el agua
Antes se seguir con la comparativa, debemos recordar que la Organización Mundial de la Salud parte de la premisa que cuanto menos alcohol, mejor, y especifica que "no existe un consumo mínimo que permita beber alcohol sin ningún riesgo". Los expertos secundan esta afirmación. Ana Puga, profesora de nutrición la Universidad CEU San Pablo afirma que no se debe comer ni con vino ni con cerveza, "la mejor opción para acompañar las comidas es siempre el agua, el vino y la cerveza se pueden tomar ocasionalmente pero jamás se podría recomendar ingerir alimentos acompañados de una u otra por un tema de salud".
Esta opinión la comparte la farmacéutica y dietista-nutricionista Carlota Martín-Maestro quien remarca que lo más importante es tener en cuenta con qué se compara. "Una copa de vino siempre será mejor que cualquier refresco o bebida energética o azucarada, pero el agua es la opción más saludable". Otro dietista-nutricionista y profesor de la Universidad de Vic, Julio Basulto, también afirmó en el 39º Congreso de la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (semFYC) celebrado en Málaga, que "no hay razones para recomendar como beneficioso para la salud del conjunto de la población el consumo de bebidas alcohólicas de cualquier graduación".
¿Y si tengo que elegir?
No obstante, si les damos a elegir una u otra opción, las opiniones son variopintas y se incluyen categorías interesantes como las bebidas ‘sin’. Aproximadamente el 93% de un litro de cerveza es agua, pero también lo es que el proceso de fermentación del cereal empleado en su producción convierte a la cerveza en una bebida que contiene entre un 4 y un 5% de alcohol, salvo cuando se trata de cervezas SIN que son, precisamente la opción elegida por la profesora Ana Puga. “Si yo tengo que escoger, ¿qué recomendaría? Pues una cerveza sin alcohol. La creencia popular dice que con una copita de vino se ingieren taninos, antioxidantes, vitaminas… pero lo cierto es que son componentes nutricionales de la dieta que están presentes en otros alimentos que no aportan tantas calorías”.
Para la Evelyn Martín Moraleda, nutricionista de la Clínica Forma y Toletvm Crossfit, a la hora de elegir una u otra opción debemos tener claro qué buscamos exactamente. “Si queremos perder peso y una reducción calórica, la cerveza aporta mucha menos energía, pero en sí, el vino es mucho más saludable por los taninos y antioxidantes que contiene. No obstante, tanto una como otra deben ser con moderación por el alcohol añadido”. En la misma línea nos cuenta Emilio Galindez, nutricionista de la Polinclínica Castillo nos explica que “en principio son muy parecidos en vitaminas y proporción de nutrientes, pero el vino aporta el doble de calorías. Sin embargo, no podría recomendar ni una ni otra por el alcohol que contiene. El agua es siempre la mejor opción”, concluye.