En enero llevamos ya casi 70.000 despidos en el sector tecnológico. Más de 200.000 en el último año. En los últimos días, compañías como Amazon, Google, Microsoft, Meta o Twitter han anunciado recortes masivos en su plantilla para afrontar la actual situación económica. Los últimos en sumarse a la lista son IBM (3.800 despidos) y el gigante alemán SAP (3.000). Como cada semana en 'MoneyTalks', Javier Ruiz nos explica el por qué de esta ola de recortes en las big tech. No hay una fotografía uniforme en el sector, pero en general durante la pandemia se contrató sin cabeza y ahora tienen que despedir sin corazón.
Efectivamente, en los momentos más acuciantes del covid las tecnológicas experimentaron un crecimiento vertiginoso y acudieron al mercado laboral para expandirse y ampliar sus líneas de negocio, pero el regreso a la normalidad ha motivado que sus beneficios hayan dejado de multiplicarse, por lo que se está optando por aligerar los equipos.
Todas estas empresas siguen ganando mucho dinero. Es cierto que los beneficios son menores que durante la pandemia, pero aún siguen siendo extraordinarios. Sin embargo, cuando llega el momento de ajustar, quien lo paga el trabajador. Surge entonces una pregunta: Si cuando hay menos ganancias la perjudicada es la plantilla, y cuando hay más ganancias quienes se lo llevan son los accionistas e inversores, ¿cuándo gana el trabajador?
Si nos fijamos en casos concretos, el de Amazon es particularmente sangrante. Duplicó su plantilla durante la pandemia porque necesitaba servir y distribuir. Se aprovecharon de mucha mano de obra barata y ahora, cuando las ganancias se han reducido, pero sin entrar en pérdidas, se han despedido a 18.000 trabajadores. Y eso presentando beneficios de 2.900 millones de dólares en el último trimestre. Se podría argumentar que la robotización y la digitalización nos está llevando a este escenario, pero no es verdad. Muchas de estas compañías aún no han hecho esta inversión todavía.
Google está en circunstancias similares, aunque en su caso se contrató a mano de obra muy cualificada durante los peores momentos del coronavirus. Ahora despide al 6 por ciento de su plantilla, pero va a ganar 13.900 millones de dólares en el trimestre. Peor es es caso de Twitter, que en Estados Unidos despidió al 50 por ciento de su plantilla, y sin indemnización. Esta falta de responsabilidad corporativa generalizada y otros casos del sector tecnológico se desgranan en el vídeo de esta semana. Dale al play.