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La detención de los seis integrantes de una banda que presuntamente robaba en urbanizaciones de lujo de la Comunidad de Madrid, fundamentalmente en las que viven futbolistas como Radamel Falcao, del Rayo Vallecano, o Rodrygo Goes, del Real Madrid, vuelve a poner el foco en las implicaciones que tiene enseñar en las redes sociales más de lo necesario. En este caso, los ladrones recurrían a ellas para estudiar fotografías y vídeos que familiares y personas de los deportistas publicaban del interior de las viviendas y así hacerse una composición del lugar al detalle.
Pero los futbolistas no son los únicos que han sufrido situaciones parecidas. Al riesgo de mostrar casas, actividad y planes de ocio en las redes sociales se exponen no solo influencers sino cualquier persona normal que comparte contenido con sus seguidores. No somos conscientes de que, sin querer, estamos proporcionando datos relevantes a las bandas profesionales que les permiten conocer el objetivo. A día de hoy a través de las redes sociales es muy fácil averiguar dónde vivimos y cómo es nuestra casa, cuál es su disposición, el mejor sitio para entrar y dónde buscar lo que les interesa. Luego los ladrones estudian horarios, costumbres de los familiares, desplazamientos y ausencias, y así disponen de toda la información necesaria para acometer el asalto.
"La población banaliza el uso de redes sociales y, en realidad, cada nueva publicación da acceso a cualquier persona del mundo a información privada. En Italia, se desarmó una banda que examinaba las fotos que los famosos publicaban en sus casas para hallar los mejores sitios para acceder, así como cuándo estaban en ella y cuándo salía", comentan desde una conocida empresa de seguridad que cita 'El Debate'.
La Policía Nacional siempre pide prudencia a la hora de publicar información relacionada con nuestras vacaciones en Instagram, TikTok, Facebook y Twitter, sobre todo si también se ha mencionado el lugar de residencia o se han publicado fotografías del domicilio, para prevenir los robos en el interior de las viviendas de cara al periodo vacacional. Entonces, ¿tenemos que cerrar nuestras redes? Tampoco hay que llegar a tanto. Se pueden utilizar sin necesidad de exponerse demasiado a desconocidos. Desde 'Home Go' comparten una serie de consejos para usarlas de forma segura y satisfactoria.
Hay que tener claro con quién conectas en las redes sociales. No puedes dar detalles sobre ti, tu familia o tu casa a cualquier desconocido. Lo más fácil para un ladrón es conectarse contigo en Facebook y así descubrir dónde vives, por dónde te mueves, qué lugares frecuentas y tu red de amigos. Así, que lo más efectivo para evitar facilitar los robos en casa es no aceptar solicitudes de amistad de nadie que no conozcas.
Hay precauciones que son de sentido común, pero que conviene tener presentes. No puedes tener en tus redes sociales la misma contraseña que para el banco. Y usa letras mayúsculas y minúsculas, signos y números para aumentar la seguridad. Del mismo modo, es un error poner tu nombre o tu fecha de nacimiento en cualquier contraseña. Y debes ser muy precavido al utilizar un ordenador compartido. Asegúrate que el navegador que estés utilizando no memoriza tu contraseña, y cierra siempre la sesión de tus redes antes de irte. Además, evita utilizar conexiones wifi abiertas para acceder a tus cuentas en redes.
Mucha gente nunca ha entrado en la sección de privacidad y seguridad de sus cuentas, pero merece la pena detenerse en establecer unos parámetros que te posibiliten una navegación más segura. Puedes determinar quién puede ver tu perfil, leer tus publicaciones o escribir directamente. En Facebook, por ejemplo, puedes clasificar qué publicaciones pueden ver los contactos que tú desees. Es fundamental que no cuentes tus planes de viaje a todo el mundo, permitiendo que un potencial ladrón sepa que tu casa va estar vacía porque te vas de vacaciones.
Cuando estás en tus redes, a tu alrededor hay multitud de elementos (banners, publicidad, mensajes) que pueden utilizar los ciberdelincuentes para robar tus datos a través de prácticas como el phishing o el smishing. Duda siempre antes de pinchar en un enlace desconocido. Confía en links que vayan cifrados con https, ten siempre un buen antivirus instalado y tus dispositivos actualizados.
Después de tomar todas las precauciones de seguridad y privacidad, también conviene usar la cabeza antes de publicar cualquier contenido en nuestras redes. ¿Es necesario compartir en tiempo real lo bien que lo estamos pasando en ese exótico viaje a África? Quizás puedas esperar a estar de nuevo en casa para hacerlo. O compartir una foto sin decir dónde estás exactamente o cuándo vas regresar. Recuerda que tus perfiles en redes sociales son hoy la fuente de información más valiosa que puede tener un ladrón.