Inés Sastre no fue una modelo más con un rostro que enamora a la cámara y un cuerpo de diez. Decidió compaginar las sesiones de fotos y las pasarelas con el estudio, porque su inquietud iba más allá de la moda y los cosméticos. Hace unos años se trasladó a nuestro país después de haber estado viviendo en París desde su adolescencia. A punto de celebrar su 51 aniversario, en Uppers hemos querido saber cuál es la vida actual de Inés Sastre en España junto a su hijo Diego Corrias.
La modelo, que nació en Valladolid el 21 de noviembre de 1973, se trasladó a Madrid con sus padres y su hermana cuando era muy pequeña. Estudió en un colegio bilingüe en francés y, antes de que empezara a trabajar como modelo, sus padres, Eduardo Sastre y Candelas Moratón, se divorciaron. Con 12 años protagonizó un anuncio de McDonald’s y al verla el director de cine Carlos Saura le ofreció un papel en la película El Dorado. Al poco tiempo Inés ganó un concurso de belleza de la agencia Elite, lo que supuso su lanzamiento como modelo. Tenía solo 15 años.
En cuanto empezó a trabajar ya no paró , sin embargo, terminó sus estudios, se quedó a vivir en París y se matriculó en la Universidad de La Sorbona para cursar Filología Francesa. Tanto en campañas publicitarias como en desfiles fue la imagen de las mejores marcas como Max Factor, Vivelle, Chaumet y lució los diseños de Chanel, Vivienne Westwood, Gaultier o Paco Rabanne. Igualmente, sacaba tiempo para colaborar con campañas solidarias y siguió rodando para el cine. Inés Sastre declaró en una entrevista que “la publicidad me permite no tener que hacer 15 películas para vivir como quiero”.
La modelo y actriz protagonizó Más allá de las nubes en 1995, una adaptación de cuatro cuentos del escritor italiano Michelangelo Antonioni, en 1996 sucedió a Isabella Rossellini como imagen del perfume Trèsor de Lancôme durante tres años y a la vez se convirtió en embajadora de Unicef. También, aceptó posar desnuda para el Calendario Pirelli de 1997. En toda la década de los noventa, no había una revista en la que el dulce rostro de Inés no estuviera presente. Su éxito fue rotundo y en cada uno de sus trabajos destacaba todavía más sobre el anterior.
Después siguió haciendo cine junto a estrellas como Gerard Depardieu, en 2000 presentó el Festival de San Remo, se convirtió en una presentadora habitual de la televisión italiana e incluso mantuvo su inquietud por formarse hasta graduarse en Literatura Medieval. Con el cambio de siglo, paulatinamente, se fue retirando de la vida pública para descansar y poder dedicarse más tiempo a sí misma.
El 8 de abril de 2006 Inés Sastre se casó con Alexandro Corrias, un empresario de la comunicación italiano al que había conocido diez años atrás. La boda se celebró en Londres junto a su familia y sus amigos más íntimos. Su hijo Diego llegó al mundo unos meses después del enlace, el 21 de agosto de ese mismo año, pero el matrimonio se divorció en 2008. Toda la infancia de Diego pasó en París hasta que cuando cumplió los 14 la modelo tomó la decisión de retornar con él a Madrid.
Desde entonces ha rehecho su vida en la capital, que compagina con sus viajes a Cádiz, en concreto a Sotogrande donde en 2005 se compró una casa. El lugar le encanta pues le permite practicar el golf, uno de sus deportes favoritos, y también la acerca al mar y a los caballos, sus otras pasiones junto al arte y la ópera italiana.
En agosto pasado su hijo Diego cumplió 18 años y tal como ha publicado Inés en sus redes sociales en septiembre ha empezado a estudiar en la universidad. Su inquietud no ha cambiado, sobre todo, su espíritu solidario. Inés es una imagen habitual de campañas de recogida de fondos para organizaciones sin ánimo de lucro como la Fundación Olivares que tiene el objetivo de mejorar la calidad de vida de los niños enfermos de cáncer y otras patologías crónicas y sus familias.
Además, la modeló forma parte de Héroes de 4 patas, una ONG que se dedica a la búsqueda de un hogar para los perros que han trabajado toda su vida con entidades como la guardia civil y ya les toca jubilarse. Está claro que la modelo ha encontrado lo que buscaba: una vida menos ajetreada y más feliz en nuestro país.