¿Qué sería de Hollywood sin Brad Pitt? Este futuro que para muchos puede parecer lejano está más cerca de lo que parece. Así lo ha afirmado el actor estadounidense en su última entrevista con la revista GQ, de la cual es portada, y en la que ha promocionado su nueva película 'Tren bala'.
A sus 58 años y con una larga trayectoria cinematográfica a sus espaldas, el intérprete está pensando en jubilarse, aunque intentará mantenerse vinculado al mundo del cine a través de la producción. El actor ha charlado con la escritora Ottessa Moshfegh ('Mi año de descanso y relajación') en su casa de Craftsman. "Ésta fue la primera casa que compré cuando gané algo de dinero, allá por 1994", cuenta el intérprete, que compró la residencia a la actriz Cassandra Peterson, conocida por 'Elvira, reina de las tinieblas'.
"De un tiempo a estar parte, me veo ya en mi última etapa", declara el actor de 'Malditos Bastardos' y 'Troya'. "¿Cómo va a ser esta fase? ¿Cómo me la voy a plantear?", se pregunta.
La edad pasa factura, sobre todo si se ha vivido una vida delante de los focos. Por eso, Pitt cuenta que decidió dejar de fumar y de beber. "No puedo fumarme uno o dos al día. No está en mi carácter. Voy a por todas. He perdido mis privilegios”, confiesa en la entrevista.
En Alcohólicos Anónimos estuvo "en un grupo de hombres estupendo, muy privado y selectivo, así que era seguro”, recuerda el actor. “Había visto lo que le había pasado a otros, como a Philip Seymour Hoffman, a quien le grabaron mientras vomitaba, y me pareció algo atroz”.
“Siempre me movía con las corrientes, a la deriva en un camino y en el siguiente. Creo que pasé años con una depresión de bajo grado, y no fue hasta que acepté eso, tratando de abrazar todos los lados de uno mismo, la belleza y la fealdad, que pude captar esos momentos de alegría”, ha contado Brad Pitt al medio. "Siempre me he sentido muy solo", confiesa.
“Aquí en California se habla mucho de ‘ser tu auténtico yo’. Me he comido mucho la cabeza con eso. ¿Qué significa ‘auténtico’? [Para mí], se trata de aceptar esas cicatrices profundas que todos tenemos”, dice el actor, que se levanta temprano para tocar la guitarra, una afición que comenzó hacia el inicio de la pandemia.
Según él mismo relata, fue la película de 'Thelma y Louise' la que permitió darse a conocer. Después llegaron éxitos, uno detrás de otro, y se postuló como uno de los actores del cine a nivel mundial más destacados. Se rumorea que gana 20 millones de dólares por película, y en las alfombras rojas es el rey, ya sea solo o acompañado por alguna de sus famosas parejas (de Jennifer Aniston hasta Angelina Jolie, con quien tiene seis hijos en común y de la que se divorció hace casi seis años).
Ahora, continuará dando que hablar pero con su productora Plan B Entertainment, que va estrenar una adaptación de la novela de Miriam Toews dirigida por Sarah Polley, que según Pitt es "una de las películas más profundas que se han hecho en la última década". Y también la esperadísima 'Blonde', basada en la biografía ficcionada de la vida interior de Marilyn Monroe de Joyce Carol Oates, dirigida por Andrew Dominik y protagonizada por Ana de Armas.
Otro proyecto paralelo que lleva a cabo Pitt es el vino de su finca Château Miraval, en la Provenza. En 2018, él y Jolie adquirieron una propiedad de más de 400 hectáreas, donde se produce un champán rosé de primera categoría que se ha convertido en un negocio multimillonario.