Tras meses de investigación, el FBI ha emitido un informe con las pruebas forenses sobre el caso del rodaje en el que falleció la directora de fotografía Halyna Hutchins tras un disparo con el arma que portaba el actor Alec Baldwin. Así, el FBI ha concluido que esa arma no pudo dispararse sin que una persona apretase el gatillo, por lo que el actor tuvo que hacerlo, contradiciendo así su versión de los hechos que difundió en una entrevista en diciembre donde afirmó con rotundidad que “no apreté el gatillo”.
Aquel incidente tuvo lugar en octubre del año pasado, cuando Baldwin ensayaba en Nuevo México una escena de ‘Rust’ con un arma que debía ser de fogueo y que, por motivos aún sin aclarar, estaba cargada.
Los informes del FBI a los que ha tenido acceso ABC News indican que el arma “no podía dispararse sin apretar el gatillo”, lo que pone aún más entre las cuerdas al actor. “Con el martillo en las posiciones en las que se encontraba, el cañón no se podía disparar sin apretar el gatillo”, indica el informe. Por ahora, las autoridades no han tomado ninguna decisión de acusación en este caso ante estas novedades, aunque se espera que la investigación continúe, con registros telefónicos a Baldwin como uno de los focos principales.
Hasta que toda la documentación no sea revisada y se envíe al Fiscal del Distrito, no habrá decisión sobre los cargos al actor y el resto de implicados en la tragedia del rodaje
Alec Baldwin concedía una entrevista en diciembre, también para ABC News, en la que recalcaba que “no se apretó el gatillo. No apreté el gatillo. Nunca apuntaría con una pistola a alguien y apretaría el gatillo”, queriendo dejar constancia que ni él ni nadie había disparado aquella pistola. Sin embargo, ahora el informe del FBI señala todo lo contrario.
Contrario también a la clasificación de la Oficina del Investigador Médico de Nuevo México, que lo indicó como accidente porque “la revisión de los informes policiales disponibles no mostró ninguna demostración convincente de que el arma de fuego se cargara intencionalmente con munición real en el set”.
Aunque Baldwin no ha hablado sobre este nuevo informe, su abogado, Luke Nikas, sí lo ha hecho, indicando en un comunicado que lo expuesto por el FBI “se está malinterpretando”.
“El arma disparó en la prueba solo una vez, sin tener que apretar el gatillo, cuando se jaló el percutor y el arma se rompió en dos lugares diferentes. El FBI no pudo disparar el arma en ninguna prueba anterior, incluso cuando jaló del gatillo, porque estaba en muy mal estado”, concluyó el abogado en su comunicado.