El Festival de Cine de San Sebastián se queda si su gran estrella de este año, Glen Close, quien era la encargada de presidir el jurado de la sección oficial de esta 70ª edición. El certamen comienza este viernes 16 y finalizará el sábado 24 de septiembre. "Lamento profundamente no poder participar en el festival, ya que se ha producido una emergencia familiar por la que debo quedarme en casa. Pido disculpas al festival, al jurado, a los cineastas, a los premios Donostia y al público del festival, por no poder estar allí para celebrarlo con todos vosotros", ha dicho la actriz, de 75 años, en un comunicado disculpándose con todos.
De esta manera Glenn Close no visitará Donostia, a pesar de lo ilusionada que estaba. "Una nueva aventura que nunca antes había experimentado", según sus propias palabras. La protagonista de 'Amistades Peligrosas' es una enamorada de la ciudad donostiarra desde hace años: "Me encanta San Sebastián, la gente es fantástica". La actriz de '101 Dálmatas' fue distinguida con un premio Donostia en el Zinemaldia, en honor a toda una carrera, en 2011 y no podía estar más feliz con esta edición: "Tengo muchas ganas de ver películas maravillosas y estoy emocionada por conocer a mis compañeros de jurado".
Close ha sido rápidamente sustituida por el certamen que ha lamentado la triste pérdida en una edición tan importante. Matías Mosteirín, el será el nuevo presidente del jurado en esta edición. Un jurado que compartirá con la directora de casting y cineasta Antoinette Boulat (Francia), la directora y guionista Tea Lindeburg (Dinamarca); la escritora y periodista Rosa Montero (España), el cineasta y artista visual Lemohang Jeremiah Mosese (Lesoto) y el director y guionista Hlynur Pálmason (Islandia).
Glenn Close es de esas actrices que hechiza con sus papeles. Sin embargo, la Academia de Cine no le otorgado ninguna estatuilla. En sus más de 40 años como actriz, acumula ocho nominaciones en total. La intérprete de 'Atracción fatal' ostenta el récord hollywoodiense de ser la actriz más veces nominada al Oscar sin haberlo ganado nunca.
La carismática actriz ha tenido una vida que bien valdría ser el guion de una película. Desde los 7 años hasta los 22, vivió dentro de una secta junto a sus padres. Un grupo radical religioso conocido como Moral Re-Armament. Algo que la marcó dramáticamente como ella misma ha confesado. " Lo que no puedes ver de mí es cómo el haber sido criada dentro de una 'secta' había tenido un efecto devastado en mi vida". se confesaba en la serie documental sobre salud mental del príncipe Harry y Oprah Winfrey.
Ella y su familia se trasladaron a la sede de la organización en Suiza, obligándola a separarse de su ciudad natal y de sus amigos, sin entender el motivo. No fueron años fáciles para la artista que ahora disfruta de su madurez en todo su esplendor.
Close se considera una madre soltera. La artista tiene una gran relación con su hija, la también actriz Annie Starke, fruto de su matrimonio con el productor de cine John Starke. La actriz de 34 años se dio el sí quiero con el consultor Marc Albu un 30 de junio de 2018. La pareja disfruta de una eterna luna de miel desde que se casaran hace cuatro años y nada haría más feliz a Close que convertirse en abuela.