Bajo ese aspecto de dulce y angelical se encuentra una mujer de firmes convicciones, una king kong del empoderamiento y de la lucha contra el edadismo. No está para callarse ni comulgar con los códigos de Hollywood. Lo mismo le da poner en jaque a la industria por cómo ha tratado a las mujeres en el cine cómo hablar de cualquier otro tema controvertido para la sociedad y que afecten a las féminas. Así es, Naomi Watts. A sus 54 años, lanza un voto a favor de tratar la menopausia como una etapa más en el ciclo femenino y que no la vida no se acaba con el fin del ciclo reproductivo: "Estoy muy orgullosa". Alcanzar la menopausia son todo ventajas para ella y al observar la estigmatización que existe, ha liderado un proyecto que cuenta con varios tips que ha querido compartir.
Ver sufrir a su madre al llegarle la menopausia, supuso un punto de inflexión y de reflexión: "Mi madre me habló de ese sentimiento de invisibilidad que sentía desde el momento en que dejó de ser fértil". Enfatiza: "Eso no puede ser así: las mujeres seguimos aquí, somos capaces de seguir destacando". Contando con que una mujer a al llegar climaterio, le que queda casi el cuarenta por ciento de su vida, precisa: "Al final, lo que queremos es que las mujeres se sientan dueñas de su tiempo, de sus vidas, y que reciban la menopausia con entusiasmo y orgullo".
Cansada de verlo como algo negativo y de la victimización que se genera en torno a ello, ha creado un servicio comunitario centrado en "soluciones holísticas" a la menilipsis. Bajo el nombre de 'Stripes' quiere que las mujeres puedan vivir ese momento "sin vergüenza, sin estigmas, sin confusiones". La actriz contribuye a saber sobrellevar los efectos físicos de la menopausia, reforzar su autoestima y erradicar el miedo que puedan tener a envejecer.
Madre de los adolescentes Sasha y Kai, de 15 y 13 años respectivamente, fruto de su matrimonio con actor Liev Schreiber, se ha convertido en una abanderada de esta etapa que vive toda mujer. "Quería crear una línea de asistencia que realmente le hablase directamente a las mujeres sobre esta etapa de la vida, desde un enfoque holístico que les sirva para sentirse visibilizadas y visibles. Y está claro que hay que hablar sobre esa parte de invisibilidad, porque parece que no hay demasiada gente dispuesta a tratar el tema".
Entre las cosas que no se valoran están: el no tener más menstruación.
El adiós al síndrome premenstrual, sus dolores e hinchazón así cómo el cambio hormonal que conlleva tristeza, apatía, cansancio.
Además, invita a recordar que una se debe sentir más sabia en la cama y fuera de ella, que sabe cuando alguien dice la verdad o cuando miente, que valora las amistades duraderas y no pierde el tiempo en las que no interesan.
Y que con la experiencia de vida te da como esa 'capa de superhéroe' con el que uno se atreve a manifestar lo que piensa, la capacidad de relativizar todo, el decir no y acostarse temprano sin sentirse culpable. Su toque más uppero no puede ser otro que el "orgullo de haber aprovechado los años 90.