Patrick Swayze se casó con el amor de su vida, la directora y coreógrafa Lisa Niemi, en junio de 1975. Apenas tres meses antes, había nacido su primer y único hijo, pero ninguno de los dos lo sabía. Jason Whittle fue producto del breve romance (algunos hablan de una sola noche) que el entonces veinteañero actor había tenido un año antes con una adolescente de 15 años, que ocultó al niño la identidad de su padre. Por esa razón, Swayze murió a los 57 años sin conocer a su único hijo, que hoy tiene 48.
Por lo que se sabe, la madre de Whittle, llamada Bonnie Kay, se llevó el secreto literalmente a su lecho de muerte, que fue donde le confesó a Jason de la aventura que había tenido, de adolescente, con el actor, que entonces tenía 20 años. Todo esto, además, ocurría tras la muerte de Swayze, por lo que padre e hijo vivieron ajenos a la verdad que sería confirmada luego por una prueba de ADN.
¿Disputa legal?
Hoy Jason Whittle es un exjugador de fútbol americano que se dedica, al parecer con bastante éxito, al negocio inmobiliario. Como deportista llegó a ser conocido por jugar como liniero ofensivo en la NFL para los Buffalo Bills. También jugó para varios otros equipos de la NFL, incluidos los New York Giants (1998-2002), los Tampa Bay Buccaneers (2003) y los Minnesota Vikings (2006). Y aunque muchos señalan que la parte de su herencia ascendería a unos 41 millones de dólares -algunos medios hablan incluso de un acuerdo entre Whittle y la viuda del actor- no existen pruebas de que el agente inmobiliario haya reclamado alguna vez dinero alguno.
Por su parte, la historia de amor de Lisa Niemi y Patrick Swayze comenzó también en la adolescencia, ya que se conocieron cuando ella tenía 14 años y el 18, cuando ella empezó a tomar clases de danza con la madre de él, la bailarina Patsy Swayze. Niemi desarrollaría su pasión por la danza a lo largo de toda su vida compartida con el actor, llegando a convertirse en coreógrafa y directora profesional. Lisa y Patrik estuvieron casados durante 34 años y nunca pudieron tener hijos, un dolor que el actor nunca ocultó, por lo que es aún más significativo el hecho de que desconociera la existencia de Jason.
Ni la viuda del actor, ni su hijo biológico, se han pronunciado públicamente sobre el vínculo hasta ahora desconocido entre ambos hombres, por lo que todo parece indicar que en efecto, se habría celebrado algún tipo de acuerdo privado.