Brian Cox es uno de esos actores que no tiene pelos en la lengua, como si el personaje de Logan Roy en ‘Succession’ se hubiese apoderado de él. En los últimos años han sido polémicas sus opiniones, por ejemplo, sobre Joaquin Phoenix, del que declaró que su actuación en ‘Napoleón’ era “espantosa”, mientras que otros como Johnny Depp o Michael Caine no se libraron de su lengua viperina en sus memorias. ¿Su nuevo objetivo? El cine en general y el de superhéroes en especial.
El cine de superhéroes lleva unos años en crisis. Desde ‘Vengadores: Endgame’ pocas cintas han terminado de destacar, lo que ha hecho que Marvel decida tomar una serie de decisiones sobre el futuro de sus proyectos con ‘Deadpool y Lobezno’ como un primer toque de aire fresco tras varias cintas que no han dado los resultados que esperaban.
Sin embargo, y a raíz de esta cinta, Brian Cox no se ha cortado en expresar su opinión sobre el cine actual durante el Festival Internacional de Cine de Edimburgo. El actor conoce bien el cine de superhéroes, pues participó en ‘X-Men 2’, una de las múltiples cintas a la que la protagonizada por Ryan Reynolds hace referencia.
Según Cox, “la televisión está haciendo lo que solía hacer el cine. Creo que el cine está muy mal”. “Creo que ha perdido su lugar debido, en parte, al elemento grandioso entre Marvel, DC y todo eso. De hecho, está empezando a implosionar. Se está perdiendo un poco el argumento”, sostiene el intérprete.
Es más, Brian Cox resalta como los actores se dedican a cintas como las de ‘Deadpool y Lobezno’ porque eso les permite ganar grandes sumas de dinero, pese a que la historia sea la misma “una y otra vez”.
“Se ha convertido en una fiesta para ciertos actores hacer estas cosas. Cuando sabes que Hugh Jackman puede hacer más, Ryan Reynolds… pero es porque van por ese camino y hace taquilla. Ganan mucho dinero. No puedes criticarlo”, resalta el intérprete de ‘Troya’.
Pero no solo critica lo que está pasando con las películas, sino también los procesos por los que hay que pasar para acceder a un papel, y ahí es donde entran los videocasting. “Ahora quieren que todos los actores y las actrices jóvenes se hagan sus propios vídeos. Tienen que hacerlos sin conocer a nadie y a veces ni obtienen resultado alguno porque los ignoran. Se pasan tres días haciendo una cinta que no los lleva a ninguna parte. Es un sistema terrible. Ojalá se acabe y pudiéramos volver a la relación individual. De eso va el arte, de las relaciones”, reivindica.