El beso en los labios de Brian Cox y Kieran Culkin: cuando tu padre por fin te demuestra que te quiere

  • Los conmovedores besos amistosos entre Culkin y Cox, padre e hijo en la ficción, conmueven a sus seguidores

  • Los multipremiados protagonistas de 'Succession' viven su camaradería a fondo en todas las galas

  • Sin embargo, no son los únicos actores que han besado en los labios a sus compañeros de reparto

Técnicamente son amigos cariñosos. Brian Cox y Kieran Culkin, padre e hijo en 'Succession', han cogido la costumbre de besarse en los labios para celebrar sus frecuentes victorias en la temporada de premios. Ocurrió en los Globos de Oro y ha vuelto a ocurrir este lunes en la ceremonia de los Emmy. ¿De dónde viene esta cariñosa y saludable costumbre?

Hay 'piquitos' y 'piquitos'. Los buenos son los consentidos, claro. Y si son entre dos amigos como Cox y Culkin, todavía mejor. ¿Por qué? Porque los hombres necesitan (todavía) derribar algunas barreras del 'mandato de masculinidad' imperante y está bien que lo hagan a besos.

Es más, los queridos protas de 'Succession' ni siquiera son los únicos que han reivindicado el ósculo amical. Uno de los personajes más graciosos de la segunda temporada de 'The Bear' es Neil Fak, interpretado por el chef y productor Matty Matheson. Fak tiene una particular relación con el 'primo Richard' interpretado por Ebon Moss-Bachrach, y al parecer la química entre ambos personajes se da también entre los actores ya que este lunes Moss-Bachrach le plantaba un 'pasional' beso a su camarada ante las risas de sus compañeros de reparto. La euforia del éxito es lo que tiene.

Crónica roja

Durante el Renacimiento era común entre familiares besarse en la boca. Y en algunas culturas de medio oriente aún es costumbre aceptada entre hombres. Pero si hablamos de besos masculinos, nada como la vieja URSS. En efecto, una de las pocas que se extrañan de la aplicación soviética del comunismo son sus gestos apasionados: qué mejor forma de mostrar tu confianza a un camarada que plantarle un beso en los morros.

No lo decimos nosotros lo dijeron en su momento Brezhnev y Honecker, que en 1979 llevaron el llamado 'beso fraternal socialista' a niveles icónicos, rollo graffiti en el muro de Berlín y todo eso.

El beso en la boca en tiempos soviéticos era una cuestión de confianza y no solo se practicaba con viril entusiasmo sino que se animaba a hacerlo entre los soldados, como prueba este cartel conmemorativo de la Revolución.

Saber perder (con un beso)

Pero volviendo a las alfombras rojas, a algunos ni siquiera hace falta ganar para expresarse a besos. En los Globos de Oro de 2017 Andrew Garfield le dijo a su amigo Ryan Reynolds que si ganaba lo besara a él en lugar de a su esposa. Tristemente, Reynolds no ganó, pero entonces ambos se dijeron 'Bueno, podríamos hacerlo de todas formas' y así mientras Ryan Gosling subía a recoger la estatuilla por 'La La Land', Reynolds y Garfield aparecían comiéndose la boca en fondo.

Más aún, cuando tiempo después el presentador Stephen Colbert le preguntó a Garfield si se sentía cómodo besando a otros hombres el actor contestó 'Tío, ni siquiera entiendo tu pregunta'. "La verdad es que yo tampoco" replicó Colbert. La entrevista terminó, como debía ser, con un beso. Bienvenidas nuevas masculinidades.