Con ese ritmo, ¿quién se resiste a vacunarse contra el covid? Los rostros conocidos están siendo clave en las campañas de vacunación alrededor de todo el mundo. El último ejemplo lo ha dejado el actor británico Anthony Hopkins, de 83 años, marcándose un baile por Elvis Crespo dos días después de compartir el momento en el que recibía su correspondiende segunda dosis de la vacuna. El entusiasmo del actor es tal, que da ganas de ponerse en pie y correr a inoculársela.
"¡Soy colombiano!", grita mientras baila con una camisa hawaiana y pantalón corto a ritmo de merengue. Es su hijastro, Juan Miguel Arias, quien graba al otro lado del teléfono. Una demostración también de la unidad familiar multicultural que ha creado en California junto a su esposa, la colombiana Stella Arroyave (64).
Hopkins ya había compartido el proceso al ponerse esa primera dosis, que recibió desde su coche y tras un año de cuarentena autoimpuesta. Ya entonces, tras colgarlo en sus redes, calificó el momento como "una luz al final del túnel".
Como el actor que interpretara al mítico Hannibal Lecter, son otros muchos los famosos que, aprovechando su turno de vacunación y sin trampas, han usado su altavoz mediático para concienciar de la importancia de tomar esta medida de prevención contra la expansión del virus. Entre ellos, Dolly Parton -que además contribuyó económicamente al desarrollo de la vacuna-, Arnodl Scwharzenegger, Bill Gates o el presidente estadounidense Joe Biden.
Son la cara opuesta (y mayoritaria) frente a alguno de los abanderados negacionistas, como ocurriera con Victoria Abril en la rueda de presentación de los premios Feroz -aunque después se retractara en la gala-, o Miguel Bosé, a quienes sus propios compañeros de profesión han desacreditado por obviar con sus palabras el dolor y sufrimiento de las personas que han perdido a sus seres queridos a causa del virus.