"Si se lo digo yo, no me hace caso, pero basta con que se ponga de moda...". Muchos padres de adolescentes tienen que lidiar con actitudes, digamos, 'poco receptivas' por parte de sus hijos. Muy distinto es cuando se trata de una tendencia en redes o de la recomendación de alguna celebridad. Es así. Y ya puestos en situación más nos vale aprovechar cuando dichas celebridades usan su poder para el bien, que es el pensar, y tratar, discretamente eso sí, de que esta vez sí se dejen 'influenciar'. Así que gracias, Rosalía, por hacer que las nuevas y tan a menudo desorientadas generaciones se pregunten quién diablos es Dick.
"Sus colaboraciones, sus coreografías, sus videoclips o su uso de las redes sociales establecen puentes con los principales ámbitos creativos de nuestro tiempo", decían los editores de 'La Rosalía' (Errata Naturae, 2021), un libro en el que intelectuales de distintas disciplinas exploraban distintos ejes conceptuales de su obra. No es gratuito que a Rosalía se le analice e investigue desde la 'intelligentsia'. Desde la propia concepción de 'El Mal Querer' - basado en una novela occitana del s. XIII-, la artista ha mostrado, sin alarde alguno, sus intereses literarios.
En esta ocasión el libro elegido por la artista para compartir con sus seguidores es nada menos que 'Amo a Dick' (Alpha Decay, 2013 y 2022), una novela de la norteamericana Chris Kraus que cuenta la historia de la obsesión de la protagonista homónima por un intelectual al que se dedica a seguir por todo Estados Unidos. Con esa premisa, Kraus construye una poderosa obra de ficción cuyos materiales se asientan en la descripción más íntima –pero cuya forma deviene, casi, en manifiesto o ensayo epistolar– para revelarnos los rasgos de una identidad femenina nueva, tan exploradora de sí misma y de sus propios impulsos como de los mecanismos intelectuales y culturales que la llevan a emprender su camino. "Sin duda para el promedio de los músicos, Rosalía es una intelectual, no me extraña que lea y disfrute de un libro tan conceptual", ha dicho Gabriela Wiener, autora del prólogo a la última edición del libro.
La novela tuvo un enorme éxito, se convirtió en nuevo clásico del feminismo del s. XXI y hasta tuvo una versión en serie: 'Amo a Dick' (Prime, 2017), protagonizada por Kathryn Hahn y Kevin Bacon, se ha convertido también en serie de culto.
"Rosalía ni siquiera tiene que escribir un post literario o pretencioso, le basta con mostrar lo que tiene en su mesa de noche", dice Wiener. Y tiene razón. Hace poco te contábamos como una foto de la artista había desatado la curiosidad por Angélica Liddell. Pero ese no es el único libro que ha recomendado. De hecho, sus múltiples lecturas sugeridas o comentadas darían ya para sugerir, como quien no quiere la cosa, un pequeño 'club literario' entre los más jóvenes. Pero así, como hace la propia Rosalía, sin que parezca que les decimos lo que tienen que hacer.
Tan sutil se ha mostrado Rosalía que la revista Vogue tuvo que ponerse en plan 'detective de instagram' para identificar plenamente los libros que aparecen en su cuenta. Así, en un 'bodegón' libresco publicado por la cantante, aparecían libros como 'Feminismo pasado y presente' (Turner Minor), de Camille Paglia, 'Lo más importante es saber atravesar el fuego' (Colección Visor de Poesía), de Charles Bukowski o el 'Diccionario de composición poética: Ábrelo por una página y empieza a rimar', de Fernando Pastor, un recurso útil para escritores. Más directamente ha hablado de 'Agua y Jabón' (Anagrama Colección Compactos), el diario también ensayístico de la periodista catalana Marta D. Riezu, que tampoco 'recomendaba' pero cuyas páginas reproducía.
Algunos otros libros que han aparecido en las 'Biblioteca Rosalía' : 'En la tierra somos fugazmente grandiosos' (Anagrama), de Ocean Vuong, 'Kate Bush: An illustrated Biography' (Proteus Proteus Publishing), de Paul Kerton, el poema 'Life Doesn’t Frighten Me', de Maya Angelou, ilustrado en 1993 por Jean-Michel Basquiat o 'La gravedad y la gracia' (Editorial Trotta), de Simone Weil.
Como puede apreciarse, son lecturas en su mayoría feministas (que equivale a decir indispensables) pero variadas en géneros y estilos. No son libros sencillos, como en el caso de 'Amo a Dick', pero a poco que pongan un poquito de empeño, pueden ser altamente gratificantes para los más jóvenes. Después de todo, si Rosalía lo dice...