Con el aniversario de la muerte de Pau Donés aún reciente, su voz no ha llegado todavía a apagarse. El artista Eugenio Ortiz, Uge acaba de lanzar una canción que grabó con el autor de “La Flaca” antes de su fallecimiento den 2020.
'Ni tú para mí, ni yo para ti' es el titulo de esta pieza que ha emocionado a los oyentes. "Pau escuchó mis canciones y le gustó mucho esta", asegura el ex guitarrista de Extremoduro.
Según ha informado la oficina de prensa del artista en un comunicado, la canción fue compuesta por ambos artistas, pero no ha sido hasta ahora que el guitarrista ha querido dar a conocerla "como homenaje" al que fuera líder y cantante de Jarabe de Palo.
"Pau decía que (la canción) estaba oculta entre tantas buenas canciones y decidió cantarla a dueto conmigo, aparte de ayudarme en la composición de los coros", relata Uge a EFE.
El tema 'Ni tú para mí, ni yo para ti', ha sido lanzado por la distribuidora de música digital Beatclap, y podrá escucharse a partir de este viernes en más de 100 plataformas de 'streaming'.
Ni tú para mí, ni yo para ti.
Si tu mirada no vuelvo a ver
Quizás no hay nada
Si tu tacto me fue negado
Sabes niña, de tu figura esclavo.
No hay dolor, aunque los ojos lloraran
Fue un adiós tan triste
Que marchitó la mirada.
Ni tú para mí, ni yo para ti.
Recuerdos de noches robadas,
De engañar al destino, ¿en cuántos nos vimos?
De sábanas blancas, de tu pelo en mi cara,
De ir despacio y que la noche no terminara,
De no tener prisa y morder tu sonrisa.
Dulce mentira fue tu olor en mi almohada,
Dulces tus besos cuando te marchabas,
Dulce el aroma de tu mirada,
Dulces palabras que me quemaban.
¿Por qué el deseo caprichoso de naufragar en tus ojos?
¿Por qué dejamos pasar tantas cosas, si la distancia, cada vez, era más corta?
Bebamos vino sin hacer ruido,
Dejemos que la luna sea testigo
Que por mucho que ande andas siempre conmigo,
Que no fue casualidad, que los momentos vividos,
Al tiempo robados y al destino pedido prestado.
Ni tú para mí, ni yo para ti.
Dulce el ayer, dulce hoy no queda nada,
Solo el recuerdo de tu aroma en la almohada,
Dulce la luz que, a oscuras, me iluminaba
Dulce el recuerdo de las noches robadas.
Del deseo, las ganas
Y de ti, la locura.
Y andando, andando, hicimos una:
Fue tenerlo tan claro, que nos separamos.
Ni tú para mí, ni yo para ti. ©copyright los40.com