Ayer, con solo 59 años, nos dejó Francis Cuberos, promotor musical, representante de artistas, gestor cultural y el hombre que en 1988 creara Espárrago Rock, el primer macrofestival de rock en España. Cuberos ha muerto en Sevilla, su tierra adoptiva desde hace años, tras luchar durante otros tantos contra el cáncer.
Francisco Cuberos Jiménez fue durante más de diez años programador del auditorio Rocío Jurado, en Sevilla, y tenía una agencia de representación llamada Música es amor, por una canción del grupo colombiano Aterciopelados; pero sin duda se le recordará por haber creado en una feria agrícola de un pequeño pueblo granadino el que se convertiría en el primer macrofestival de rock en España y se mantendría durante sus 15 ediciones, como el más importante del sur del país: Espárrago Rock
Francis habría querido ser maestro, su primera vocación, pero el destino le tenía reservado un papel en la historia festivalera española. Mientras se buscaba la vida en Granada, volvía cada año a la cosecha en su natal Huétor Tajar, a cultivar espárragos, cebollas, patatas y cuidar de la vaquería familiar. Para principios de los 80, un curso de animador sociocultural le mete el gusanillo del espectáculo y cuando en 1988 le pidieron desde el ayuntamiento de Huétor que organizara la presentación de un par de bandas locales en una feria agrícola con la que se buscaba promover el espárrago, nació casi sin pensarlo el mítico festival cuyo nombre, ligado a ese producto agrícola, mantuvo orgullosamente durante años.
Por el escenario del Espárrago, que se celebró durante dos años en Huétor Tajar y luego, dado el éxito de convocatoria, se trasladó a Granada durante 13 años para terminar realizándose en Jerez, pasaron Rosendo, Extremoduro, Aterciopelados, Orishas y también Neil Young, Iggy Pop o Cypress Hill, entre muchísimas otras estrellas.
La última edición del Espárrago Rock se celebró en Jerez de la Frontera (Cádiz) en 2003. Una serie de reveses climáticos, se suspendieron actuaciones de cabezas de cartel como Lou Reed o Cranberries debido a la lluvia, hizo que el festival entrara en pérdidas y dejara de existir. Quedan para la historia sus 15 ediciones y la tenacidad de Francis Cuberos, que desde su pequeña localidad agrícola logró a atraer a estrellas globales y poner a España en el mapa de los macroeventos globales.