Al igual que limpias tu casa, a los objetos que más usas también se les debe dar un repaso de vez en cuando, especialmente ahora que vivimos rodeados por el coronavirus. Si eres aficionado a la música y tienes alguna guitarra en casa con la que animas las veladas con los amigos o la familia también hay que limpiarla. Eso sí, siempre cuidadosamente para no dañar su superficie ni sus materiales y poder seguir amenizando las quedadas con tu música. Además, con una buena limpieza de todas sus partes, en especial del diapasón, se conservará siempre de la mejor forma para ofrecer un sonido ejemplar.
Una de las partes más importantes de la guitarra son las cuerdas que, tras un tiempo, por su desgaste, habrá que cambiar. Baratas no son, por eso mismo es necesario cuidarlas para prolongar su vida lo máximo posible. Hay productos específicos para el cuidados de las cuerdas, aunque un paño humedecido en agua también sirve para tenerlas siempre en buen estado. Ojo si vas a tocar la guitarra justo después de limpiar las cuerdas, ya que por lo general estarán más resbaladizas. Hay quien las prefiere así porque consigue mayor rapidez de movimiento, aunque a otros muchos esa sensación no les llega a convencer del todo cuando tocan.
En cuanto al cuerpo de la guitarra, si se suele limpiar con frecuencia no va a tener una gran suciedad acumulada, por lo que un paño con agua será suficiente para dejarla como nueva y no estropear la madera. Aún así, siempre hay ocasiones en las que la suciedad está más presente, por eso mismo en esos casos es recomendable usar un producto específico para la guitarra y su acabado y que así acabe reluciente. Además, la mayoría de estos productos hidratan la superficie y la protegen, ayudando a su mantenimiento.
Sin embargo, si no tienes nada a mano, un paño de microfibra, como el de las gafas, con un poco de agua puede serte muy útil para la limpieza, ya que se deshace del polvo y también hace desaparecer la huellas de los dedos.
El mástil y el diapasón es la parte de la guitarra en la que probablemente más suciedad se acumula, algo lógico, pues los dedos están en constante movimiento en esa zona y en contacto con las cuerdas. En el mercado hay especialmente bayetas o paños concretos para la limpieza de esta zona, desde maderas barnizadas a las que están sin barnizar. De esta manera se cuida la superficie eliminando esa suciedad que ni te habías percatado que estaba sobre el diapasón y, además, hidrata y hace que se recupere el brillo de la madera. Aún así cuidado con la nutrición de la madera del diapasón, unas dos veces al año es lo ideal, sino la madera puede sufrir más de la cuenta y terminar desgastándose.
De todas formas, el aceite de parafina o el de linaza son bastante eficaces para la limpieza del diapasón, así que si no quieres comprar un producto específico, cualquiera de los dos servirá para su mantenimiento.
El diapasón del mástil de una guitarra está dividido por los trastes, que suelen ser de metal. Además de cualquier limpieza casera, también existen productos específicos, aunque con muchos de ellos es recomendable cubrir el diapasón porque podría dañarse mientras se limpian los trastes. Eso sí, el metal quedará igual de reluciente que cuando compraste la guitarra.
Las clavijas se suelen limpiar de la misma forma, pero hay que tener especial cuidado con su lubricación para cuando lo necesite, echar el producto para que funcionen como deben y la guitarra se mantenga afinada. Además, para que dure limpia, llévala siempre en la funda y lávate las manos antes y después de tocar para que su brillo dure mucho más tiempo.
Tener un instrumento significa cuidarlo, y en el caso de las guitarras hay que mimarlas cada cierto tiempo para que tú disfrutes tocando y tus amigos de la mejor música. Una buena limpieza permitirá un buen rendimiento de la guitarra, además de su magnifica conservación.