Joan Manuel Serrat, Joaquín Sabina, Javier Krahe, Silvio Rodríguez, Víctor Jara... Nuestra vida sería un poco más oscura sin la luz que nos han brindado los grandes cantautores del siglo XX. Desde la 'Elegía' de Serrat hasta 'La Hoguera' de Krahe, muchas de sus canciones nos han acompañado mientras nos hacíamos un poco más mayores (y nos acompañarán hasta el final de este viaje que es la vida). Por eso, muchas veces conviene recordarnos a nosotros mismos lo importantes que han sido estos artistas en nuestro desarrollo vital. En este contexto, a Ismael Serrano (46 años) le ha parecido conveniente reivindicar la figura del cantautor, muchas veces maltratada en su opinión, a raíz de una broma de El Mundo Today (que por cierto, se ha tomado bien).
En un hilo de Twitter, el cantautor madrileño se ha plantado contra la sorna con la que muchas veces, desde su punto de vista, se trata a los cantautores. "Reconozcámoslo: no toco la guitarra como Van Halen. Pero convengamos que algunas canciones de los cantautores son más complejas armónicamente que la mayor parte de las canciones de pop o de rock patrios", ha defendido Serrano.
"De hecho, no tantos músicos de pop o de rock son capaces de interpretar sus canciones solos con su guitarra. Ni qué decir sostener un recital entero. ¿Por qué tanta risa en torno a la figura cantautoril?", se ha preguntado el cantautor, que también ha criticado que cuando "un músico acude a ser entrevistado a la tele, en el 90 % de los casos es para hacer chistes". Respecto a los motivos de las bromas continuadas, ha presupuesto que se da por la "tendencia a la solemnidad y la seriedad".
También se ha referido a la "caricaturización del que se compromete políticamente". "Dibujarlo como un anacronismo ha sido tendencia desde cierta crítica periodística. Los músicos hemos caído en la trampa: nos preocupa más ser panfletarios que cursis", ha señalado Serrano. En esta ocasión, ha querido defender "una forma de entender mi oficio, una tradición algo maltratada. Y de paso señalar una cierta tendencia a ver la humillación una fuente de humor válida".
El asunto es ciertamente espinoso, por lo que ha tenido que aclarar que no se trata de una "sanción penal" contra los cómicos, el motivo por el que ha querido reivindicar el oficio. "Permítanme el desvarío, que últimamente son algunos de ustedes los eternamente ofendidos, se toman toda crítica como una sanción penal. Y no. De la misma forma que mis canciones no han de gustar a todo el mundo, sus chistes tampoco", ha aclarado.
Serrano ha querido cerrar la discusión llamando a la concordia. "Hay chistes de mal gusto que no tienen nada de transgresores (por más que a posteriori así se defiendan). Son simplemente malos. Supongo que todos, cantautores y cómicos, tenemos que aprender a encajar mejor las críticas", ha cerrado el madrileño.