Jesús Quintero, 'El loco de la colina', quiso despedirse de este mundo con un monólogo como los que solían cerrar sus programas de radio y televisión, un epìtafio pronunciado por él mismo y que pidió a un amigo que hiciera llegar sus seres más allegados tras su muerte, según ha desvelado Carlos Herrera en su programa de radio matinal en la Cope. El comunicador onubense, fallecido a los 82 años, reflexiona en esas últimas palabras sobre el éxito y el fracaso, cita a Sartre y a un poema de Juan Ramón Jiménez y se despide de todos: "Hemos recorrido juntos muchas noches y ahora nuestros caminos se separan".
La grabación corresponde en realidad al último programa de 'El loco de la colina' emitido en Canal Sur. Con el título de 'Todo es mentira', el discurso transmite desengaño y hastío, pero también belleza. "La televisión es mentira. La publicidad es mentira, la política es mentira. Mentira cochina (...) De seguir así va a ser más fácil creer en Dios que creer en el Hombre", comienza la alocución. Quintero continúa lamentando que "la fama aburre; la gloria pesa" y abunda en que "todo es naufragio, derrumbe. Todo es fracaso. Pero no lo pienses y procura disfrutar de todo".
El comunicador prosigue en un tono más poético: "mientras las estrellas prosigan por el cielo su marcha inexorable, la colina, los ratones se repliegan sobre sí mismos y su aire sereno se queda en silencio, un silencio propicio para la reflexión o el descanso". Y después quiebra con una genialidad: "Ahora me voy a contestar yo mismo, no sé en qué lugar, las preguntas que le he hecho durante todo este tiempo a los demás".
Las últimas palabras de Quintero corresponden al poema 'El viaje definitivo', de Juan Ramón Jiménez: "En el rincón aquel de mi huerto florido y encalado, mi espíritu errará nostálgico y yo me iré y estaré solo, sin hogar, sin árbol verde, sin pozo blanco, sin cielo azul y plácido".
Carlos Herrera ha querido despedirse de Quintero dedicándole de forma íntegra su monólogo de 'Herrera en Cope': "No dejó ninguna pregunta por hacer e hizo cosas que él solo podía hacer gracias a su intuición. En la vida se pueden conseguir muchas cosas, pero no se consigue la gloria si no tienes el factor que te hace diferente: la personalidad. Eso lo tenía Jesús. Era pícaro, listo, conocedor de todos los puntos de la profesión. No sé si el personaje tenía mucho de él o él mucho del personaje, pero era un loco en una colina. Era unas noches de radio irrepetibles, 82 años, se ha ido Jesús Quintero, y hoy le dedico este programa. Le quería mucho y le seguiré queriendo en la ausencia, como la mayoría de los que le hemos conocido".
El mítico presentador, creador de múltiples formatos de radio y televisión, fue ingresado a principios del pasado mes de septiembre en la Residencia de Nuestra Señora de los Remedios, situada en la localidad gaditana de Ubrique, tras ser operado de una patología cardiaca hace unas semanas. Allí falleció este lunes en la hora de la siesta.