El euro digital cada vez está más cerca. No reemplazará a los billetes y las monedas que hay en circulación pero sí vendrá a ofrecernos una "opción adicional" ante la creciente demanda de pagar digitalmente con rapidez y seguridad. El Banco Central Europeo (BCE) ya está trabajando en este nuevo método aunque su implantación no llegaría por lo menos hasta 2025.
De la misma manera que funciona el dinero en efectivo, el euro digital también sería posible utilizarlo en una tarjeta o con una aplicación en el teléfono móvil diseñada con ese propósito, el de pagar con dinero digital. Asimismo, la versión digital también estaría emitida por el BCE, no sería “dinero privado”. Al no tratarse de capital creado por un banco comercial, "constituiría un ancla para la estabilidad de los sistemas de pago y de los sistemas monetarios", según la propia web del BCE.
A diferencia de las criptomonedas como el Bitcoin, el euro digital supondría "un medio de pago electrónico que cualquier persona podría utilizar en la zona del euro", que sería "seguro y fácil de usar, al igual que el efectivo en la actualidad". "No tendría riesgos y respetaría la privacidad y la protección de datos”, añaden.
Sin embargo, Christine Lagarde, la máxima autoridad del BCE, ha admitido que el anonimato total (como el que ofrece el efectivo) no es una opción viable: “Contravendría otros objetivos de política pública, como garantizar el cumplimiento de las normas contra el blanqueo de capitales y luchar contra la financiación del terrorismo”. En cualquier caso, sí ha resaltado que “al menos deberíamos ofrecer un nivel de privacidad igual al de las actuales soluciones de pago electrónico”.
La emisión del dinero digital en Europa también podría suponer para el BCE una manera de alcanzar los distintos objetivos que se marquen el resto de bancos centrales, así como de las políticas generales de la Unión Europea (UE) en materia económica. Además, sería una manera de respaldar la digitalización de la economía en la Zona Euro, especialmente en el momento actual, en el que el pago con dinero físico se ha visto muy reducido.
Respecto al calendario de introducción del euro digital, el BCE indica que “tras el trabajo de experimentación realizado junto a los bancos centrales nacionales de la zona del euro, en julio de 2021 se inició la fase de investigación del proyecto de un Euro Digital”, en la que se está examinando cuál sería el diseño y el método de distribución, así como el impacto que este tendría en el mercado.
Esa tarea culminará antes de que finalice el mes de octubre de 2023. Entonces, “el Consejo de Gobierno decidirá a continuación si pasamos a la siguiente fase, en la que nos ocuparíamos del desarrollo de servicios integrados y se realizarían pruebas y posibles experimentos reales de un euro digital. Esta fase podría durar unos tres años”, aunque antes podría llegar un prototipo regulado.