Estás cansado de recibir llamadas publicitarias. No te interesa contratar un producto y ya no sabes cómo quitarte de encima a un comercial que te acosa día y noche por teléfono o SMS. Quizás, incluso, te has apuntado a un servicio de exclusión publicitaria, como la Lista Robinson, pero te siguen llamando. ¿Qué puedes hacer?
La lista Robinson es, como se autodefine, "un servicio de exclusión publicitaria" cuyo objetivo es disminuir la publicidad que recibas de diferentes empresas. Su origen se remonta al año 1993, cuando nació como un servicio dirigido a evitar el acoso publicitario postal y, después, telefónico. Con la expansión de las nuevas tecnologías, su protección se extendió a todo tipo de publicidad: postal, telefónica, por correo electrónico, SMS, etc.
Su nombre alude al náufrago Robinson Crusoe (el protagonista de la famosa novela del mismo nombre escrita por Daniel Defoe), que permaneció aislado durante años en una isla desierta. Así, también los usuarios de la Lista permanecen aislados de la publicidad no deseada.
Si quieres dejar de recibir llamadas de teléfono, correos o SMS con todo tipo de anuncios, "puedes inscribirte en el servicio, que es gratuito, de manera muy sencilla desde su página web", tal y como explican desde Adigital, la Asociación Española de Economía Digital que gestiona el fichero.
Accediendo al servicio con tu usuario y tu contraseña podrás modificar tus datos básicos, los datos de los canales por los que no quieres recibir publicidad o darte de baja en el servicio. La inscripción en esta lista es efectiva para evitar llamadas de empresas a las que no se ha dado el consentimiento a partir de los dos meses desde la introducción de los datos.
Tu inscripción puede tardar en ser plenamente efectiva hasta dos meses, ya que es posible que tus datos ya estén siendo utilizados por alguna campaña comercial en ejecución. Todo el mundo que quiera evitar o librarse del acoso publicitario se puede inscribir en el servicio de Lista Robinson. Los menores de 14 años no pueden hacerlo; tendrán que ser sus padres o tutores legales los que le hagan la inscripción en el registro.
De acuerdo con el Reglamento de 2007 (de desarrollo de la vigente ley española LOPD de 1999), las empresas están obligadas a consultar estas listas. Hay sanciones para las que no cumplan con esto, desde el 25 de mayo de 2018.
Hay que tener presente que "si una empresa tiene el consentimiento del destinatario y puede acreditarlo, no es necesario que consulte la Lista Robinson antes de contactar con él", aclaran. Es el caso de una compañía con la que hayas tenido relación antes; aunque se terminara, si no has señalado que no deseas ya recibir publicidad, puede seguir haciéndolo.
Por ello, además de inscribirte en la Lista Robinson, si deseas evitar llamadas publicitarias, "debes contactar con la empresa que los emite" para notificarle tu deseo de no recibir publicidad. Tienes que hacerlo a través de los canales de privacidad que tenga.
En todo caso, conviene seguir las siguientes recomendaciones de la propia Agencia Española de Protección de Datos (AEPD):