Hace solo unas semanas explicábamos que desde junio habrá un cambio en el cálculo de la factura de la luz que se será notable en gran parte de los hogares españoles porque la parte variable ganará peso frente a la parte fija, además de las tres tarifas que variarán según la hora a la que encendamos la bombilla o pongamos la lavadora. Pero antes de esto la mayoría de hogares ha sufrido una subida en su factura de marzo a pesar de no existir un gran cambio en el uso o el consumo. ¿A qué se debe esta subida inesperada?
Más que con el cambio que se viene en junio, esta subida tiene que ver con que España ha superado los límites de emisiones de CO2 que la Unión Europea tiene marcados. Por eso mismo la factura de la luz ha subido unos 11 euros de media en marzo respecto al mismo periodo del año pasado, según ha expuesto Facua-Consumidores en Acción. Todo ello sin alcanzar el precio que el kilovatio hora (kWh) llegó a tener en enero, cuando experimentó una gran subida llegando a una media 16'75 céntimos en el primer mes del año, frente a los 14'13 céntimos de marzo.
Por eso mismo la factura de la luz no ha subido por el consumo o el precio de la luz, sino por lo que explicábamos anteriormente: por las emisiones de CO2. La Unión Europea tiene marcados unos límites que, si se superan, conllevan un impuesto mayor porque el CO2 es uno de los principales causantes del calentamiento global y, por tanto, del cambio climático.
Pero, ¿por qué las emisiones de CO2 encarecen nuestra factura? Los principales emisores de este gas que produce el efecto invernadero son el transporte y las centrales eléctricas que queman carbono y gas natural, expulsando carbono a la atmósfera, según explicaba el experto energético Jorge Morales en el programa Cuatro al día.
Como bien el experto ha recalcado, son las centrales a las que se les cobra ese plus y en marzo se han alcanzado los 40 euros por tonelada de CO2, el doble que hace dos años, lo que hace que las centrales hidroeléctricas y nucleares, que no emiten CO2, aprovechen que los permisos de la emisión de este gas se han encarecido para directamente repercutir en nuestra factura, por eso hemos pagado más en este último mes.
La nueva factura, que llegará a partir de junio, afectará a aquellos que tengan contratada una potencia inferior a 15 kW, la mayoría de consumidores domésticos. De esta manera el 75% de la factura representará la energía consumida, y solo el 25% la parte fija establecida por la potencia contratada, una forma de que, según el gobierno, se fomente el ahorro y el autoconsumo.
Para ellos existirán tres periodos diferentes en los que las tarifas serán más caras o baratas dependiendo del momento del día: