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¿Eres un corredor de fondo, de los que llevan toda la vida currando y no saben lo que es el SEPE; o un velocista, de los que van del paro al curro y del curro al paro? Dependiendo de cómo sea tu carrera (laboral) así te va a afectar el cambio en las pensiones que negocia el Gobierno con patronal y sindicatos. Se trata de ampliar el número de años que se tienen en cuenta para calcular la pensión, pero también de mejorar las condiciones de los que se han perdido el trabajo al final de su carrera, o los que han tenido una vida laboral intermitente. Te contamos cómo te va afectar el cambio, ya tengas una carrera laboral larga y continuada, o bien abrupta y con cambios.
En lo que queda de año se tienen que cerrar dos puntos importantes de la reforma de pensiones: uno, ampliar las bases máximas de cotización y las pensiones máximas; y dos, modificar el número de años cotizados que se tienen en cuenta para calcular la pensión. Éste último punto, la modificación del periodo de cálculo, va a traer cola, ya que puede afectar de forma importante a la pensión que cobrarán los futuros jubilados.
Ampliar el periodo de cálculo se ha utilizado en anteriores reformas para ahorrar gastos al sistema. En 1985 se amplió de los últimos 2 años, a los últimos 8. En 1997 se pasó de 8 a 15 años, y en 2011, de 15 a 25. El ahorro se produce porque en los últimos años de carrera es cuando más altos sueldos se suele tener, y más se cotiza a la Seguridad Social, con lo que ampliar el periodo de cálculo significa recortar la pensión a los jubilados, y por ende un ahorro para las cuentas públicas.
Ampliar el periodo de cálculo es el compromiso que el Gobierno tiene con Bruselas para sanear las cuentas del sistema de pensiones. Antes de fin de año hay que aprobar la medida, y el ministro del ramo, Jose Luis Escrivá, se esfuerza por consensuar una medida que contente a los sindicatos, a sus socios de Gobierno, a los empresarios, a los ciudadanos y a los contables europeos, casi nada.
La negociación está en marcha, y el Gobierno todavía no ha presentado ninguna propuesta concreta, pero ya ha adelantado algunas pistas. El ministro de la Seguridad Social, José Luis Escrivá, ha declarado que "se pueden ajustar tres elementos: el periodo de cómputo, la exclusión de los peores años, y la cobertura de las lagunas de cotización".
La ampliación del periodo de cálculo es la que más afectará a los pensionistas de mañana. Escrivá ha reculado en su propuesta inicial de ampliar de los últimos 25 años a 35 años, lo que según los cálculos del Gobierno supondría una rebaja de pensiones del 6% para 2 de cada 3 pensionistas. Otros estudios sitúan esta rebaja en casi el 9%.
No obstante el periodo de cálculo se va a ampliar para el 70% de los futuros pensionistas, aquellos que tienen carreras de cotización largas y continuadas, lo que supondrá sin duda un empeoramiento de sus pensiones con respecto a la fórmula actual.
El ministro pone el acento en el 30% de trabajadores que han empeorado sus condiciones laborales en la última etapa de su carrera, pero no dice claramente que el 70% de los trabajadores, que tienen carreras continuas, verán reducida su pensión, si se amplía el periodo de cálculo.
Falta saber el número de años que se amplía, cuantos más años se tengan en cuenta, más perderán estos trabajadores, aunque Escrivá ha afirmado que "en ningún caso estamos hablando de 35 años".
Si tu carrera ha terminado antes de tiempo, si te han despedido pasados los 55 y has cotizado poco los últimos años, la reforma te beneficia en cualquier caso. Al ampliarse el periodo de cálculo, computarán aquellos años en los que cotizabas más, y tu pensión subirá. Además, entre las propuestas que se manejan está la de excluir los peores años de cotización para este colectivo, lo que también mejoraría tu futura pensión.
Si tu carrera ha tenido muchas intermitencias, con periodos de trabajo con otros de inactividad sin cotizaciones, también se plantean mejoras a tu pensión. Ahora, si tienes hasta cuatro años de lagunas sin cotizar se pueden rellenar con el 100% de la base mínima, y con el 50% de los cuatro años en adelante. Lo que ahora se plantea es ampliar este periodo para cubrir más tiempo sin cotizar. Esta medida beneficia especialmente a las mujeres, cuyas carreras suelen ser más desiguales e intermitentes.
La aplicación de la medida que se tomé se hará de forma gradual, por lo que no afectará a los que estén muy próximos a la jubilación. Por ejemplo, para pasar de los 15 a los 25 años tenidos en cuenta hoy, se tardaron 9 años.