El esperado acuerdo para la segunda fase de la reforma de las pensiones ya está aquí. El ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, lo ha cerrado prácticamente con Bruselas y además se ha asegurado el apoyo de Unidas Podemos a las medidas. La Comisión Europa ha aceptado la última propuesta del Gobierno español sobre el periodo del cómputo, el aspecto clave que había impedido cerrar el pacto en el plazo previsto, el 31 de diciembre del año pasado. ¿Cómo influirá este acuerdo en tu pensión? Te lo explicamos.
Aunque ni Escrivá, ni el PSOE, Unidas Podemos o fuentes comunitarias han adelantado las medidas concretas, sí se sabe que implicará un cambio en el sistema de cómputo de la pensión, y que el compromiso alcanzado por el ministro incluye aumentar los ingresos de la Seguridad Social.
Según ha avanzado 'El País', el planteamiento de Escrivá es que el pensionista pueda elegir entre seguir con el sistema actual, de contar los últimos 25 años cotizados, o por otro de 29, de los que el jubilado podrá excluir los dos de peor cotización. Enn la práctica, el pensionista podrá escoger lo que le sea más conveniente: entre un cómputo de 25 o uno de 27 años. La Seguridad Social aplicaría de forma automática el sistema que más beneficioso resulte, pero el jubilado siempre podría elegir. Al permitir que el pensionista elija el periodo cotizado que le sea más favorable, es de prever que los sindicatos den el sí a esta medida.
La propuesta de Escrivá se ha ido modulando con el paso de los meses. En noviembre puso encima de la mesa elevar el periodo de cómputo a 30 años, pudiendo descartar los dos de peor cotización. Pero tanto los sindicatos como Unidas Podemos lo rechazaron por significar un endurecimiento del acceso a la jubilación.
La nueva propuesta presenta dos opciones: una que ampliaría el periodo de cómputo y otra que lo deja como está. La primera alternativa es la que satisface a la Comisión, que esperaba un aumento de este concepto, mientras que la segunda es la que pondría de acuerdo a sindicatos, Unidas Podemos y los socios parlamentarios de izquierdas del Ejecutivo, que sostenían que los incrementos suelen causar una reducción de la pensión final. La posibilidad de que los pensionistas opten por el cómputo de 25 años, disipa esta posibilidad para aquellos que hayan tenido carreras laborales irregulares, con periodos sin cotización, un escenario que afecta sobre todo a las mujeres.
Junto a este punto, la reforma incluye medidas para mejorar los ingresos del sistema empezando por un destope de las bases máximas de cotización, un elemento rechazado por la patronal que, previsiblemente, se descolgará del acuerdo.
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha dado por zanjado un acuerdo que, según sus palabras, protegerá las pensiones y reforzará el carácter redistributivo del sistema. “Lo haremos incrementando los ingresos que aportarán las empresas por los salarios más altos y protegiendo más las pensiones más bajas”, ha señalado en un mensaje en Twitter.
Asimismo, la ministra de Derechos Sociales y secretaria general de Podemos, Ione Belarra, en su cuenta de Twitter, ha confirmado que "la propuesta sobre pensiones que hoy hace el Gobierno a los agentes sociales ha sido muy trabajada y demuestra que lo que siempre ha dicho Podemos es posible. Ampliamos derechos a los y las pensionistas, garantizando la sostenibilidad del sistema gracias al aumento de ingresos".
Por su parte, fuentes de la Comisión Europea han admitido los contactos "intensos" en las últimas semanas con el Gobierno español sobre la reforma del sistema de pensiones, que es una de las condiciones a las que estará sujeto el desembolso de los 10.000 millones del cuarto pago del fondo anticrisis que España aún no ha solicitado.