Vivir con amigos y sin hipoteca: cómo el cohousing está apartando la soledad de cada vez más gente

Decía Alfredo Bryce que "la patria son los amigos". Lo mismo puede decirse de la jubilación. Al menos a tenor lo que está ocurriendo en España con el cohousing senior, la alternativa a las residencias tradicionales que han sido durante décadas los espacios de retiro (o confinamiento, todo hay que decirlo) de la gente mayor. Y aunque estos espacios no están pensados para personas en dependencia -de hecho la edad requerida para ser parte suele estar entre 50 y 70 años- si están preparados para cuando llegue ese momento.

La buena compañía

Ahora le toca el turno a Galicia, que tiene en la cooperativa Ancoradoiro, la punta de lanza de esta verdadera tendencia entre las personas en edad de jubilación. Según informa 'La voz de Galicia', en 2017 empezó la andadura de esta iniciativa, y no era más que un sueño de unos pocos amigos que, como tantos otros en distintas partes de España, empezaron a preguntarse ¿por qué no envejecer juntos, con cuidados mutuos y con el bienestar que reporta siempre, estar en compañía de amistades?

Seis años después, el proyecto se ha concretado con la adquisición de unos terrenos en Nigrán (Pontevedra) donde planean tener listos los 25 primeros módulos de vivienda en 2017. La modalidad, como suele darse en este tipo de proyectos, no es la de vivienda en propiedad, sino una cesión de uso.

"Refugio climático"

El proyecto, de hecho ya empieza a hacerse notar en otras latitudes. "Viene gente de fuera de Galicia incluso. Galicia es un refugio climático. Un suelo cerca del mar donde se puede edificar y pasar los últimos años de la vida resulta atractivo para mucha gente", asegura al medio gallego Lucía Calvo, presidenta de la Cooperativa.

Ancoradoiro se suma así a las distintas cooperativas que, con propósitos similares, han surgido por distintas regiones de España a lo largo de las últimas décadas. Una de las más exitosas es la de Trabensol, en la Comunidad de Madrid, proyecto pionero de la "autogestión democrática" para constituir "una familia de familias" como dicen ellos mismos.

Pioneras

Pero en realidad nada de esto sería posible nuestro país sin el arrojo que tuvieron hace más de treinta años mujeres como Aurora Moreno o Ana Rosa Pérez, dos de la fundadoras del primer cohousing español en Málaga. La cooperativa Los Milagros se creo en 1991 y después de luchar contra la desconfianza que suscitaba el modelo en esa época, los primeros "vecinos" se afincaron allí nueve años después.

Tres décadas después, hay casi 150 viviendas cooperativas en españa y 12 de ellas son exclusivamente para seniors. A ellas se sumará en breve Ancoradoiro, con sus propias reglas y su propia personalidad (no piscina, ni mascotas, por ejemplo) pero con el mismo afán de hacer del envejecimiento una experiencia activa (y colectiva).