En 2020 hemos vivido una subida en las pensiones, pero como seguramente sabrás, el cálculo de la pensión de jubilación varía en función de la edad y los años cotizados, que cada año cambia. Pero el aumento que se ha realizado afecta tanto a la pensión mínima como a la cuantía de la pensión máxima que los jubilados pueden percibir. Por tanto, en la jubilación juegan muchos factores que determinan el dinero que se recibirá en cada mensualidad, tanto para aquellos que ya están jubilados como para los que los que adquieran la condición de pensionista.
El primer paso es saber cuándo se puede jubilar una persona, pues la edad y la cantidad de años cotizados cambia año tras año. Para que una persona con 65 años pueda hacerlo en 2020 necesita tener ya cotizados como mínimo 37 años, mientras que si no se tiene esa cantidad acumulada podrá acceder a la jubilación con 65 años y 10 meses. Pero en 2021 volverá a cambiar, pues todo el que quiera terminar su vida laboral con los 65 años recién cumplidos tendrá que acumular un mínimo de 37 años y tres meses cotizados y, si no se llega, se podrá jubilar una vez cumpla 66 años. Por tanto ya ves que cada año se necesitan más tiempo de cotización para acceder antes a la jubilación.
Más allá de los años cotizados y la edad, aunque guardan relación, el cálculo de la pensión de jubilación se realiza a través de la base reguladora y esta, a su vez, depende de la base de cotización que la persona ha tenido durante un periodo de tiempo. Pero veámoslo poco a poco.
La base de cotización es la remuneración mensual bruta de un trabajador que tiene un mínimo y un máximo sobre el que cada mes la empresa aporta una cantidad a la Seguridad Social. Se debe conocer que cuanto mayores sean las cotizaciones, mayor será la futura pensión de jubilación. Sabido esto, para calcular la base reguladora hay que fijarse en cada año, pues el periodo de cotización cambia, por ejemplo, en 2020 se tienen en cuenta para la base reguladora los últimos 23 años, mientras que en 2021 los últimos 24, y en 2022 serán los últimos 25 años. Ese periodo se contabiliza a partir del mes previo a la jubilación.
Las bases de cotización de cada persona es lo que hace que la base reguladora varíe, pero en general, si se cumplen los requisitos para la jubilación se podrá acceder al 100% de la base reguladora. En cambio, existe una norma transitoria y, si te jubilas con solo 15 años cotizados, se tiene derecho al 50% de la base reguladora, un porcentaje que aumenta dependiendo de los años cotizados.
Por ley, en España hay un mínimo en cuanto a la pensión pública de jubilación que, aunque según los años cotizados o su base reguladora no se llegue a ella y sea inferior, se puede cobrar ese mínimo. Ahora, tras la subida de las prestaciones, el mínimo y el máximo han variado a lo que se percibía en 2019.
Los jubilados con 65 años y un cónyuge a su cargo reciben durante este año un mínimo de 843’4€ mensuales, mientras que si el beneficiario de la pensión mínima no tiene cónyuge, la cifra se establece en 683’5€. La última variable para estos casos es que los jubilados que tienen cónyuge pero este no está a su cargo, la prestación mínima que pueden percibir es de 648’7€ al mes.
¿Qué ocurre con el máximo? Pues al igual que se regula el mínimo de las pensión, lo mismo se hace con el máximo, y la reciente subida de las prestaciones ha hecho que aumente. Actualmente el máximo que se puede cobrar por la pensión pública asciende a 2.683’34€ al mes.
Además, los cambios en las pensiones no solo afectan a los jubilados, sino que también a las demás prestaciones de la Seguridad Social como la pensión por viudedad, que su mínimo varía en función de las cargas familiares y la edad, la de orfandad o para personas con incapacidad permanente.
La edad, el tiempo y las bases en las que se ha cotizado es lo que finalmente determina la pensión pública de la Seguridad Social para la jubilación. A pesar de haber un mínimo que se puede cobrar, este puede superarse fácilmente si se cumplen los requisitos para la jubilación. Probablemente no se llegue a cobrar la máxima, pero sí una cantidad superior al mínimo.