La Covid19 ha quebrado la tendencia ascendente del gasto en pensiones contributivas por primera vez en 15 años, desde que hay registros. La nómina general del mes de mayo se ha reducido en algo menos de 27 millones de euros, pasando de los 9.879,16 millones en abril a los 9.852,78 millones de euros de este mes. Las razones de este descenso en el gasto son varias, y todas relacionadas con el coronavirus. El primer lugar, durante los últimos tres meses se han producido más de 25.000 fallecimientos de pensionistas registrados por el Ministerio de Sanidad, gran parte de ellos en el último mes, cuando se produjo el pico de la epidemia. Te ponemos la cifra en contexto para entender si es importante o no esta bajada para el propio sistema de pensiones.
Resumiendo mucho y dejando a un lado el inconmensurable dolor de las familias, el descenso en el gasto de un 0,27% es llamativo, pero a la larga y dentro del conjunto de sistema de pensiones no deja de ser sobre todo anecdótico, ya que la nómina de este mes supone un aumento del 2,52% respecto a la de mayo de 2019, y la tendencia seguirá al alza en los próximos meses, cuando se normalice la situación y la generación de los Boomers, que ha soportado el sistema durante décadas, siga jubilándose cuando le vaya tocando.
Por otro lado, el cierre de las oficinas de la Seguridad Social y el confinamiento de la población ha impedido que muchos nuevos jubilados se den de alta en el sistema. En consecuencia, en mayo se han pagado 9.754.137 pensiones contributivas, 38.508 menos que el mes anterior. Acumulando los descensos en número de prestaciones de marzo y abril, la pandemia deja al sistema con 51.000 pensiones menos que en febrero, cuando se alcanzó el máximo histórico de 9.805.149 pensiones.
El confinamiento y el cierre de las oficinas hacen que, en lo que va de año, se haya registrado un 34% menos de expedientes de alta en pensiones, en comparación con el mismo periodo del año pasado. Por ejemplo, en marzo y abril se han iniciado 32.512 expedientes por jubilación, frente a los 49.798 de un año antes. Pero el alta en pensiones tiene efectos retroactivos, y los que tienen derecho a pensión la solicitarán en los próximos días, con la apertura de las oficinas de la Seguridad Social.
Otro de los datos llamativos que dejan los números presentados por la Seguridad Social es el descenso del número de pensiones de viudedad. En el último mes se han perdido más de 13.000, y en relación con el mes de enero, se han perdido más de 20.000 prestaciones de este tipo, lo que indica la alta incidencia que ha tenido la epidemia en las mujeres mayores. El gasto en pensiones de viudedad se ha reducido de 1.706 millones en febrero a 1.698 en mayo.
Además, la pensión media del Sistema, que comprende las distintas clases (jubilación, incapacidad permanente, viudedad, orfandad y a favor de familiares), alcanzó los 1.010 euros mensuales, lo que supuso un aumento interanual del 2,03%. La pensión media de jubilación ascendió a 1.160 euros, un 2,02% más respecto al año pasado. Por su parte, la pensión media de viudedad fue de 724 euros al mes.
Las nuevas pensiones son superiores a la media del sistema, y son casi un 10% más altas que las nuevas pensiones del año pasado. Las pensiones correspondientes a las nuevas altas de jubilación fueron de 1.472 euros al mes. Las del Régimen General llegaron a 1.616 euros mensuales.
Pese a lo llamativo de las cifras presentadas este martes, sigue abierto el debate sobre la necesidad de reformar el sistema ante el aumento del gasto que se prevé en los próximos años. En el último informe de recomendaciones de la Comisión Europea se alertaba a España en este sentido "en particular, los planes del Gobierno de volver a vincular de forma permanente las pensiones al índice de precios al consumo y de disociar el nivel de la pensión inicial de los cambios en la esperanza de vida (...) aumentan el gasto en pensiones de forma significativa y empeoran la equidad intergeneracional", denunciaba la Comisión.
"Esto ocurre en un contexto en el que la adecuación futura de las pensiones se situará de media por encima de la de la UE y en el que la pobreza afecta sobre todo a los grupos de edad más jóvenes, incluyendo a los niños", afirmaba el Ejecutivo comunitario. Y aconsejaba al Gobierno tomar "medidas compensatorias adecuadas" para garantizar la sostenibilidad de las pensiones, concluía la Comisión. El debate sobre la reforma de las pensiones, una de las medidas angulares que el Gobierno quiso articular antes de la pandemia, sigue abierto, y se antoja ahora más necesario y complicado que nunca.