Una de cada cinco personas en el mundo padecen dislexia, o lo que es lo mismo, tienen dificultades para leer y escribir con fluidez y sin errores y pueden tener problemas de comprensión. Pero lo que antaño suponía un estigma a pesar de no estar relacionado con la inteligencia del individuo, hoy puede haberse convertido en una ventaja competitiva a nivel profesional.
Lo cierto es que las personas disléxicas tienen capacidades diferentes y mayores aptitudes para la creatividad, la empatía, la resolución de problemas y las habilidades de comunicación. Precisamente estas soft skills coinciden con algunas de las habilidades que más se demandarán en el sector laboral en el futuro, según el Foro Económico Mundial.
"Los disléxicos tienen las habilidades exactas que se necesitan para el mundo laboral de hoy en día", afirma Carol Coleman, directora del área de Soporte al Estudiante de The British School of Barcelona. Esto les convierte en unos de los profesionales más demandados entre las compañías.
La escasez de talento en el mundo empresarial es un gran problema al que las organizaciones hacen frente actualmente. Esta escasez de talento (del 64% en España, según ManpowerGroup) abre la puerta a las personas con dislexia, ya que pueden convertirse en una fuente de talento hasta ahora inexplorada.
La dislexia podría ayudar a las organizaciones a reducir la brecha de competencias para dar respuesta al contexto de rápido cambio en el que está inmerso el mundo del trabajo. Con mayores capacidades cognitivas, como la visualización y el razonamiento lógico y gracias a los rasgos emprendedores naturales, las personas disléxicas pueden aportar una perspectiva fresca y a menudo intuitiva para formar puntos de vista alternativos y resolver problemas de forma creativa, según afirma Made By Dislexia.
Infojobs indica que algunas de las soft skills que están empezando a valorar las empresas son la empatía con un 28%, la creatividad con un 19%, la asertividad con un 13% o la curiosidad con un 10%. Así pues, las personas disléxicas disponen de unos puntos fuertes naturales que les hacen estar preparados para cubrir este vacío de competencias.
Incluso LinkedIn, la mayor red profesional del mundo, ahora ofrece a sus más de 774 millones de miembros la posibilidad de incorporar el pensamiento disléxico como una skill adicional a la hora de completar su perfil y que las empresas puedan seleccionar como un activo más a la hora de buscar candidatos.
Este nuevo enfoque pone de manifiesto por qué la dislexia debe ser una prioridad en los colegios. “Ahora más que nunca es necesario reorientar la visión que se tiene de la capacidad disléxica, alejarnos de los enfoques tradicionales y potenciar los puntos fuertes para ayudar a los alumnos a alcanzar su máximo potencial”, explica Carol Coleman. “No obviamos las dificultades inherentes a tener dislexia, pero hay muchísimos más elementos positivos que superan de largo las dificultades", agrega.
“Detectar, apoyar y potenciar las mentes disléxicas, así como concienciar y visibilizar la dislexia en positivo, son la clave para redirigir la dislexia hacia la creación de un talento que se adapta perfectamente al cambiante mundo laboral” concluye la directiva de The British School of Barcelona.