A raíz de la pandemia del covid-19 el teletrabajo experimentó un auge extraordinario, convirtiéndose en una de las mejores opciones para la conciliación familiar y laboral. Muchos países empezaron a implantar medidas para atraer a los nómadas digitales, trabajadores que deciden moverse por todo el mundo aprovechando que pueden desempeñar sus funciones en remoto. En ese sentido, un estudio de la plataforma de recursos humanos Remote.com sitúa a España como el país donde mejor calidad laboral tienen los empleados que teletrabajan.
La reciente introducción de programas de visa para nómadas digitales y la nueva Ley de Start-ups, que busca atraer a emprendedores, talento y capital extranjero, han contribuido a consolidar a nuestro país como un imán para el talento internacional.
Cuestiones como la flexibilidad laboral y el equilibrio entre vida laboral y personal son aspectos cada vez más valorados por los profesionales. España, con su enfoque más relajado hacia el trabajo y sus horarios más flexibles, ofrece un entorno propicio. Y muy especialmente Madrid se destaca como el principal destino para aquellos que buscan una combinación de calidad de vida, acceso a Internet de alta velocidad y un poder adquisitivo razonable.
La capital española cuenta con un amplio abanico de actividades culturales, además de un buen ambiente y una excelente oferta gastronómica. Otras ventajas son los incentivos fiscales para trabajadores remotos y las opciones a la hora de conseguir visados para expatriados, sean autónomos o trabajadores remotos por cuenta ajena.
En ese empeño por fomentar el teletrabajo, la Comunidad de Madrid concederá una ayuda a las pymes y trabajadores autónomos que contraten a nuevos empleados en remoto, o que conviertan a empleados ya contratados a una modalidad de teletrabajo, con una subvención de hasta 2.500 euros por empleado, hasta llegar a un máximo de 10.000 euros por empresa.
Por lo demás, Madrid es uno de los mejores lugares para vivir, ya sea trabajando en remoto o en presencial. Conviene no olvidar que cuenta con la mayor esperanza de vida en toda Europa, con una media de 85,8 años y, según los madrileños, la calidad de vida es notable, con una calificación de 7,8.
A pesar de las ventajas que ofrece España como destino para los nómadas digitales, conseguir los visados y cumplir con los requisitos legales puede ser tarea difícil. Los solicitantes necesitan un ingreso mensual mínimo de 2.160 euros, que varía según el estado familiar. Los requisitos esenciales incluyen un contrato de trabajo estable, consentimiento del empleador y la existencia de la empresa durante un año. Por otra parte, el exceso de expatriados puede tener un impacto negativo en la economía local al contribuir al aumento de los precios, especialmente en el caso de la vivienda.
Además de la capital española, el informe de Remote.com recoge otras nueve ciudades favoritas por los nómadas digitales: