2020 será recordado por ser el año de la pandemia, y por ende, el año de los cambios. Porque todo, en mayor o menor medida, se ha modificado a nuestro alrededor. La forma de relacionarnos, las prioridades, el ocio... Y por supuesto, el entorno laboral. En un año marcado por el teletrabajo y las reuniones virtuales, las empresas buscan cada vez un mayor equilibrio entre las cualidades humanas y las técnicas. Entre las habilidades más demandadas desde el punto de vista humano, es precisamente la adaptación al cambio una de las que más ha crecido, según un estudio reciente.
Infojobs, la plataforma de búsqueda de empleo, ha elaborado un informe acerca de las cualidades más difíciles de encontrar (y por ello, más valorables) en los empleados. Las empresas también han tenido que modificar muchas de sus rutinas para adaptarse a una realidad complicada en el contexto de la pandemia del coronavirus y la limitación de movilidad. Estas son las cualidades más demandadas desde el punto de vista humano.
Según los resultados extraídos del estudio, la capacidad de trabajo en equipo sigue siendo la habilidad que más preocupa a la hora de contratar, con un 71 %. Le sigue la proactividad, es decir, la toma de iniciativa por parte de los empleados, con un 58 %. Resolver conflictos de forma eficaz, con un 53%, completa el podio de las cualidades más demandadas. Y es a partir de aquí cuando crece la adaptación al cambio, valorada por el 51% de las empresas, así como la oritentación a resultados.
Por debajo de lo que más se pide está la capacidad de trabajo bajo presión (38%), la capacidad de toma de decisiones (34%), una buena comunicación (31%), la empatía (28%) y la escucha activa, con un 20%. Otros factores como la creatividad, la negociación y la asertividad, así como la curiosidad, el compromiso o la persuasión también se tienen en cuenta, aunque en menor medida en comparación con las mencionadas anteriormente.
En el caso de las grandes empresas, una de las habilidades que más dificultades entraña a la hora de encontrar es la capacidad de trabajo bajo presión, con un 56%. La adaptación al cambio sigue siendo un factor a tener en cuenta en el 51% de los casos, mientras que la proactividad se convierte en un factor a tener muy en cuenta, con un 49%. La resolución de conflictos (44%) y la toma de decisiones (42%) son muy tenidos en cuenta a la hora de contratar en una gran empresa.
El estudio también contempla las 'soft skills' que más se valoran para optar a puestos directivos. En este caso, la visión global y la amplitud de miras (41%) son las cualidades que más y mejor se esperan para aquellas personas que quieran llegar al escalafón más alto de las empresas. La honestidad y la confianza (39%) también se tienen muy en cuenta, por encima de cualidades como la organización y la vista de objetivos (37%). El compromiso y la experiencia (36 y 35%) completan el ranking de las habilidades más importantes en un directivo.