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En 2022 las empresas se van a lanzar mayoritariamente a mejorar las condiciones de sus trabajadores. Son varios los estudios y encuestas que coinciden en que la actual situación de la pandemia favorece los aumentos salariales, así que si tenías pensado reclamar una mejora en tu nómina este puede ser el momento adecuado. Más de un 90% de las empresas españolas subirán el sueldo a sus empleados en 2022, según un informe de Ceinsa para el que se ha consultado a más de 500 compañías.
La subida media de los salarios se situará en el 2,81%, siendo algo superior para jefes y mandos intermedios (3,10%) que para el personal de convenio (2,5%). Si tu empresa es de las medianas, entre 100 y 300 empleados, tendrás opciones de que tu incremento sea más pronunciado, en torno al 3,01% de media, por el 2,69% que se prevé en las grandes empresas -de más de 300 empleados- y el 2,67% en las pymes.
Los sectores con más predisposición a ofrecer nuevos contratos son salud (89%), Tecnología de la Información (87%) y farmacia (84%), según la guía del Mercado Laboral de 2022 de Hays. De hecho, durante el año pasado los perfiles que disfrutaron de las mayores subidas salariales fueron los investigadores clínicos y los técnicos de laboratorio, con incrementos de entre un 10% y un 20%, según un estudio de KPMG.
Los asesores médicos y los perfiles informáticos vinculados a la automatización, la digitalización y la ciberseguridad alcanzaron subidas del 10%, y en el sector Energía los incrementos duplican los generales del mercado, llegando al 4% en los colectivos más estratégicos.
En cuanto a las regiones con mejores perspectivas para contratar, destaca Levante, Cataluña y Andalucía, por encima del 74%, mientras que Madrid se sitúa en un 71% y País Vasco en un 64%, por debajo de la media española.
Además, las empresas españolas miran al futuro cercano con cierto optimismo. Casi el 48% de las compañías cree que su situación será mejor en los próximos seis meses, mientras que un porcentaje similar, del 45%, considera que se encontrará en una situación parecida. Solo el 6,8% de las empresas encuestadas cree que estará peor dentro de medio año.
La mayor parte de las empresas reconoce que la inflación es el motivo principal a la hora de decantarse por subir el sueldo de sus empleados. De hecho, es la causa mencionada por siete de cada diez compañías, aunque la escasez de perfiles profesionales es apuntada por el 21%. El coste de la luz o la subida del salario mínimo interprofesional es el argumento esgrimido por un 5% de las organizaciones.
En cualquier caso, la inflación media del 2021 se situó por encima del 3%, lo que significa que, aunque los incrementos salariales sean altos, no se va a ver necesariamente incrementado el poder adquisitivo de los trabajadores. Y, sin embargo, Gobierno y economistas advierten sobre evitar alzas salariales que conviertan la inflación en estructural. Básicamente porque una subida de salarios es algo permanente, mientras que la escalada de la inflación se espera que sea temporal y que comience a moderarse a mediados de 2022.
Que estamos ante un nuevo ciclo económico más optimista es algo que también refleja el hecho de que ha disminuido el temor a perder el trabajo, según indica la guía Hays. Solo un 23% de los empleados considera que las rescisión de su contrato es una posibilidad real, lo que nos devuelve a niveles prepandemia, cuando el pasado año este dató se situó en el 34%. Sube también el porcentaje de profesionales dispuestos a cambiar de empleo: Del 71% registrado en 2021 al 77% de 2022.
Todo ello pese a que la calidad del empleo en España es un 10% inferior a la media de la Unión Europea, según un estudio publicado por Funcas que tiene en cuenta la duración de las jornadas laborales, las condiciones contractuales y las perspectivas de desarrollo profesional. Así, España estaría mismo nivel que otros países de su entorno como Portugal, Francia e Italia. Muy por encima de Grecia, cuyo calidad de empleo es un 18% inferior a la media europea, pero muy lejos de Finlandia, el país con las mejores condiciones laborales de la Unión Europea, conun 7% por encima de la media comunitaria.