A la hora de pedir un préstamo hipotecario en una entidad bancaria se valora la solvencia y la estabilidad económica al igual que la edad, también clave para que sea concedido. En Uppers hemos recogido las consideraciones de los principales bancos sobre cuál es la edad máxima para pedir una hipoteca, porque es necesario tener en cuenta que sí hay limitación de edad para pedir una hipoteca.
Salir con una respuesta afirmativa de la entidad bancaria ante la petición de una hipoteca de esa vivienda soñada o de ese local que buscamos desde hace tiempo depende de los ingresos fijos y además, entre otras variables, de cuántas velas se han soplado ese año. Otro condicionante es el tiempo disponible para devolver el préstamo, ya que no es lo mismo una hipoteca para amortizar en diez años que en veinte o en treinta. Del mismo modo, cada entidad fija sus normas de acuerdo a sus políticas de riesgo concretas y en función de las directrices del Banco de España.
Como punto de partida, el mismo Banco de España también recomienda “no superar los 30 años como plazo máximo de amortización” y que “en ningún caso se destine más del 35% de los ingresos mensuales al pago de la hipoteca”.
En Bankinter, por ejemplo, el límite de edad se establece alrededor de los 75 años. Esta entidad subraya que a medida que la edad se incrementa, “también aumenta el riesgo de impago”. Por tanto, “la edad límite del solicitante de una hipoteca viene determinada en las políticas de riesgo existentes en las entidades financieras”. Igualmente, desde Bankinter añaden que “la edad del solicitante condiciona el plazo de amortización de la hipoteca”. Esto quiere decir que si la persona ya tiene una edad avanzada se rebaja en gran medida el plazo de amortización, lo que incrementa la cuota mensual. Ante los años del solicitante la política de riesgo impone menos años para terminar de pagar el préstamo hipotecario, por ejemplo, diez en vez de veinte, lo que a su vez obliga a que los recibos de cada mes sean de mayor importe.
Las entidades bancarias ponen sobre la mesa condiciones diferentes a los clientes de mayor edad a la hora de pedir esa hipoteca. Es el caso de la exigencia de contratar un seguro de vida que cubra el préstamo en caso de fallecimiento del hipotecado. Desde Bankinter además señalan que en ocasiones “es posible minimizar el riesgo mediante el aval de una persona más joven que acredite un nivel de ingresos determinado”.
Por otro lado, todos los bancos ponen en valor las ventajas con las que cuentan estas personas más mayores cuando se valoran los riesgos. Se refieren a condiciones personales que implican estabilidad financiera y suman puntos a su favor: una pensión fija mensual; un plan de pensiones privado; ingresos extra por el alquiler de otro inmueble; una casa en propiedad, ahorros en un fondo de inversión… Como resumen, en realidad no existe una norma escrita con una edad máxima para pedir una hipoteca, pero sí una edad máxima a la cual se debería haber devuelto en su totalidad ese préstamo.
Por tanto, los factores que delimitan esa edad son tres:
Bankinter, como hemos dicho ha fijado en los 75 años más o menos la edad en la que el préstamo debe haberse liquidado. Sin embargo, el BBVA lo ha rebajado a 70 años y el Banco Santander sitúa el momento de vencimiento en los 80 años. Bajo estas premisas, los límites para una hipoteca a devolver en 15 años sería solicitarla con 55 años para amortizarla con 70 años. De igual forma, si se pretende devolver en 30 años se podría firmar con 50 años y terminar de pagarla con 80 años.