Cada vez son más los productos multiusos existentes en el mercado, productos de limpieza que permiten limpiar diferentes superficies con un solo producto, ahorrando tiempo y dinero. Además, al reducir la cantidad de productos de limpieza necesarios, también se cuenta con más espacio en el hogar. Gracias a las redes sociales hacer nuestros productos de limpieza caseros es muy sencillo.
Son muchos los influencers que comparten en las redes sociales sus secretos para ordenar mejor la ropa, métodos para acortar los tiempos de algunas tareas y, cómo no, trucos de limpieza para dejar las superficies relucientes. Si hay un truco que toda ama de casa desea conocer ese es del hacer un limpiador casero que pueda con todo tipo de manchas y ese es el caso de multiusos Triple A. Este popular detergente toma el nombre de los sus tres sencillos compuestos: amoníaco, agua y alcohol, que juntos resultan infalibles en la lucha contra los gérmenes
El amoníaco convierte al Triple A en un potente desengrasante y quitamanchas, mientras que el alcohol es un efectivo limpiador que también da brillo a las superficies. El agua se usa para diluir la mezcla y que sea tan potente. Un limpiador multiusos muy barato que se puede usar en espejos, cristales, mamparas, encimeras, electrodomésticos... el uso de este detergente es muy variado.
Se trata de una fórmula de lo más sencilla. En primer lugar, necesitamos los tres ingredientes mencionados: amoníaco líquido, alcohol al 70% y agua, que mezclaremos en una botella de plástico con pulverizador a partes iguales. Las cantidades variarán en función de cuánto producto se necesite, pero como medida estándar podrían ser 50 ml de amoníaco, 50 ml de alcohol al 70% y 50ml de agua fría. El alcohol también puede ser isopropílico (disolvente de limpieza) o de quemar.
Al ser una solución con amoniaco, se recomienda utilizar guantes cuando se manipule el Triple A, así como ventilar bien las estancias para no sufrir percances con los vapores. Como cualquier otro producto de estas características, debe mantenerse alejado de los niños y de las mascotas.
Se puede usar con los utensilios de cocina, desde la freidora hasta la sartén o las ollas, pero también en los cristales de las ventanas, los espejos, el baño, la mampara de la ducha y un largo etcétera: