Los aceites esenciales son compuestos aromáticos volátiles extraídos de la corteza, flores, hojas, raíces, semillas, tallos y otras partes de las plantas. Estos aceites capturan las propiedades de las plantas, ofreciendo un amplio espectro de beneficios terapéuticos y cosméticos. Aunque muchos piensan que solo se utilizan en la aromaterapia, lo cierto es que tienen multitud de funciones y usos.
Ofrecen propiedades antioxidantes, antiinflamatorias, antimicrobianas, y humectantes que pueden mejorar la salud y apariencia de la piel. Ayudan a combatir el envejecimiento prematuro, reducir brotes de acné, promover la cicatrización de heridas, y mejorar la elasticidad de la piel, entre otros beneficios.
Los expertos coinciden en que estos aceites esenciales naturales se caracterizan por ser muy concentrados, por lo que no se deben de aplicar directamente sobre la piel ya que pueden irritar y alterar la piel, por eso deben de mezclarse con un aceite base, también conocido como portador, aceites más suaves, generalmente obtenidos de semillas o frutas que actúan como vehículos para los aceites esenciales.
La elección de aceite portador también debe tener en cuenta el tipo de piel:
Piel madura: para pieles maduras, tu aceite portador ideal será el aceite de jojoba.
Piel seca: si tu piel está escamosa y necesita un plus de hidratación, te recomendamos usar el aceite de almendra como base.
Piel sensible: aquellas pieles que sean propensas a la dermatitis u otras enfermedades cutáneas se aprovecharán de las propiedades del aceite de ricino.
Piel grasa: Para evitar que este tipo de piel quede aceitosa, el argán es el aliado perfecto.
Las medidas correctas de mezcla son de 10 a 20 gotas de aceite esencial específico por 1 cucharada de aceite base.
El aceite portador tambiés es esencialuppers.es
Los mejores aceites esenciales para las arrugas
Sándalo: Ayuda a coagular las proteínas que se encuentran en la piel, por lo que la protege de abrasiones, alergias y otros factores. También cierra los poros y suaviza la piel y las manchas que aparecen a causa del efecto del sol con la edad.
Amaro: Perfecta para aquellas personas que además de arrugas tengan la piel del rostro sensible, especialmente con problemas como la dermatitis. Además, esta planta estimula la circulación sanguínea y la renovación celular.
Granada: El aceite esencia de cáscara de granada es un buen aliado para proteger de los efectos de los rayos UVA y combatir de la acción de los radicales libres en nuestra piel.
Ylang Ylang: Conocida por ser uno de los mejores aceites esenciales para las arrugas, además también tiene propiedades antinflamatorias, por lo que ayudará a calmar rojeces y estimular el crecimiento de nuevas células.
Para piel seca
Mirra: La mirra contiene propiedades altamente hidratantes, mejorando el estado de las pieles agrietadas, además de prevenir el envejecimiento.
Palmarosa: Previene la piel seca y algunas condiciones como la psoriasis.
Camomila alemana: Es ideal para reparar la sequedad de la cara, especialmente después del contacto con el sol.
Pieles mixtas y sensibles
Pachuli: se usa para tratar muchas afecciones de la piel como el eczema o la dermatitis.
Naranja: reduce la inflamación y rojeces y es ideal para combatir la dermatitis en la cara.
Bergamota: especialmente buena para pieles con eczema. Se recomienda usarla por la noche antes de acostarse, ya que es fototóxica.
Para el acné y la piel grasa:
Geranio: Ideal para prevenir los puntos negros, este aceite esencial contribuirá a mejorar la circulación sanguínea y la distribución de la melanina por el rostro. También es adecuado para eliminar las cicatrices de los granitos de la cara.
Ciprés: El aceite esencial de ciprés tiene propiedades antisépticas, por lo que es perfecto para combatir el acné. Siendo astringente, permitirá cerrar los poros y a eliminar toxinas.
Lima: Excelente para prevenir infecciones bacterianas, también es perfecta para devolver la piel a su estado natural cuando tengas alguna herida. Es por esta razón que combate el acné y mejora la luminosidad de la piel. Esta planta también es fototóxica, por lo que debes evitar tomar el sol después de su aplicación.
Árbol de té: Uno de los mejores aceites esenciales para el rostro es el aceite del árbol de té. Este viejo conocido incrementa la inmunidad de la epidermis y tiene propiedades antibacterianas que lo hacen especialmente útil para combatir el acné y las rojeces.