¿Beber vino para estar protegidos contra el coronavirus? ¿Qué hay de cierto en el viral que circula por WhatsApp sobre las supuestas propiedades casi milagrosas del vino contra la covid-19? Sabemos que tomar una copa de un buen vino tinto es relajante, social y todo un placer, pero ahora, un estudio del biólogo molecular taiwanés Mien-Chie Hung ha apuntado que algunos componentes presentes en las uvas podrían servir contra el coronavirus. Antes de lanzar las campanas al vuelo y empezar a descorchar botellas, veamos qué hay de cierto en esos mensajes de WhatsApp y en la propia investigación de Hung.
Mien-Chie Hung, presidente de la Universidad Médica de China, Taiwán, dirigió una investigación científica sobre el tratamiento contra el coronavirus y descubrieron que el ácido tánico puede inhibir eficazmente la actividad de dos enzimas clave del nuevo coronavirus.
Como él mismo reconoció, "el plan inicial de la investigación era buscar compuestos naturales que pudieran tener un efecto sobre el SARS-CoV-2, y luego usar la proteasa del nuevo coronavirus para detectarlos. Como resultado encontramos que el ácido tánico tenía la capacidad inhibitoria más fuerte".
¿Qué significa esto? Que ese compuesto, que está presente en las uvas y, por tanto, en el vino, tiene efectos antiinflamatorios en el organismo y la covid-19 es una enfermedad que, sobre todo, produce una gran inflamación en algunos órganos. Por tanto, según su teoría, a más ácido tánico, menos inflamación.
Según Hung, "podría desarrollarse más como fármaco para el tratamiento farmacéutico en el futuro y el consumo de alimentos y bebidas adecuados también sería una forma de aumentar la inmunidad al virus". Pero, por el momento, está todo en investigación.
Evidentemente, no. Lo primero es diferenciar entre taninos y el ácido tánico. Él mismo lo explica. "Los taninos son ricos en el vino tinto porque también es rico en las uvas; sin embargo, el ácido tánico no es equivalente a los taninos. Cuando investigamos es muy difícil usar una mezcla como puede ser el vino. Lo que usamos es un compuesto puro, y ese es el ácido tánico, que pertenece a la familia de los taninos", explica.
Y continúa: "La mayoría de las veces, cuando las personas analizan el vino tinto, analizan los taninos. Sin embargo, en este momento lo que sabemos científicamente es que el ácido tánico tiene la capacidad de inhibir el Covid-19. Pero, ¿lo hará toda la familia de los taninos?".
En conclusión, lo que serviría para luchar contra la covid-19 sería, por el momento, el ácido tánico que han conseguido in vitro en el laboratorio, pero no los taninos que tiene el vino per se, al menos no en cantidades muy elevadas.
Como ha explicado Hung, el ácido tánico se encuentra implícito en los taninos, pero harían falta muchos de estos últimos para obtener el ácido, por eso ellos lo trabajan directamente in vitro en el laboratorio. Si quisiéramos sacar ácido tánico del vino, las cantidades que tendríamos que ingerir serían tan grandes que acabaríamos sin covid pero con un alcoholismo galopante.
Según Hung, lo primero que habría que tener en cuenta para saber el vino que necesitamos es conocemos cuánta cantidad de taninos podemos absorber. "Hay personas que pueden absorber el 100% de los taninos del vino en su sistema metabólico y otras que solo el 10%", explica.
Sin embargo, "basándonos en el cuerpo humano, en la investigación previa y en los datos que ya existen, para tener efecto inhibitorio con los taninos bebiendo vino necesitaríamos alrededor de un litro al día". Es decir, habría que beberse más de una botella al día para notar algún tipo de efecto beneficioso contra el coronavirus en nuestro cuerpo. Ahora bien, ¿merece la pena alcoholizarse así?
Pocas veces una investigación científica se hace viral de esta manera pero, en este caso, ha ocurrido así. Ha sido a través de WhatsApp donde ha empezado a correr una cadena de mensajes para anunciar a bombo y platillo que "el vino protege contra el coronavirus". Como hemos visto, esta afirmación es, al menos, relativa. ¿Protege contra la covid? Sí, a priori según el estudio de Hung. ¿En cantidades asumibles? Parece que, por el momento, no.
Sin embargo, la esperanza se encuentra en poder hacer medicamentos con este compuesto puro para no tener que "buscarlo" dentro del vino sino, directamente, en unas pequeñas cápsulas concentradas.