Después de que la semana pasada la reina Letizia tuviese su agenda plagada de actos en el ámbito internacional, estos días ya está de regreso atendiendo sus compromisos en España. El último ayer mismo, presidiendo la clausura de la convocatoria de proyectos sociales ‘Euros de tu Nómina’, donde se ha visto sorprendida por la petición de una de las asistentes que ha hecho que la monarca se salte el protocolo y todas las cámaras apuntasen al momento y lo imortalizasen.
“Letizia, me vas a perdonar, ¿me darías un abrazo?”, se escuchaba decir a Marujita, una señora que es beneficiara de una de las ayudas que acompaña a los ancianos que sufren soledad, como es el caso de esta mujer de 91 años.
La reina no ha dudado ni un segundo ante las palabras de Marujita y se levantaba para fundirse en un tierno abrazo con la mujer que ha durado varios segundos, con la que ha compartido algunas palabras mientras la sala se llenaba de aplausos ante el momento. “Te quiero mucho”, le dijo la mujer a la monarca, que le mostraba su agradecimiento por sus palabras.
“Pero no llore”, le dijo la reina a la mujer. “No, no voy a llorar. Pero chapó por todo lo que haces y ayudas. Disculpe alteza, porque esto no se ve en todos los sitios. Señores un gran aplauso”, le contestó Marujita consiguiendo que doña Letizia se ruborizase.
"Gracias, gracias por invitarme de nuevo a este encuentro en el que al menos un ratito esta mañana tenemos muchas razones para fijarnos en el lado más amable de la vida. Yo no sé lo que os va a pasar, pero desde luego yo voy a volver a casa con otra energía, con otra sensación. La sensación de que las cosas pueden mejorar y de que merece la pena pensar en los demás, y es que de eso se trata, de mirar lo que sucede a nuestro alrededor y ponernos en marcha, de observar nuestro entorno y hacernos la pregunta de que cómo podemos mejorar la vida de las personas que le necesitan", expresó la reina Letizia cuando subió al escenario a dedicar unas palabras al público que había asistido al acto.
Los abrazos y el contacto físico pueden tener beneficios, sobre todo tras venir de una pandemia en la que la distancia social ha marcado los últimos años. Según un estudio, el aislamiento social puede acarrear trastornos neuroendocrinos y neuroquímicos que a la larga pueden convertirse en enfermedades mentales. Además, ese aislamiento social puede afectar al razonamiento de las personas, pero también a la memoria y al equilibrio hormonal.
Un abrazo también sirve para calmar la ansiedad o el estrés, promoviendo las emociones positivas en ambas partes. Por eso mismo es común el abrazo en ciertas situaciones de pérdida, en los que se necesita combatir la soledad, brindando acompañamiento, cariño y protección a quien lo necesita.