'Expediente X' la condujo a la fama. Lo demás es historia gracias a series como'The Crown' o 'Sex Education'. Pero si últimamente está en los medios es por su opinión acerca de llevar o no sujetador. Y lo cierto es que no tiene pelos en la lengua.
Hace unos meses, Gillian Anderson se sinceró en un directo de Instagram sobre cómo le incomoda llevar sujetador y cómo ha decidido dejar de usar esa prenda. Ya durante el confinamiento por la COVID-19 se dejó ver en ropa mucho más cotidiana y ahora bromea con que es mucho más feliz cuando viste de esa manera.
La declaración, de la que muchos medios se han hecho eco, surgió cuando en ese directo uno de los seguidores le preguntó cuál es su atuendo favorito. Fue ahí cuando confesó que es "demasiado vaga" para usar sujetador: "Me he vuelto tan perezosa y ya ni uso sujetador. No puedo usar sujetador. No puedo, no puedo. Lo siento", confesaba entonces.
Anderson, de 52 años y madre de tres hijos, Piper (26), Oscar (14) y Felix (12), incluso habló de su nueva figura con el cambio de los años: "No me importa si mis pechos me llegan al ombligo, ya no llevo sujetador. Es demasiado incómodo".
Los mensajes a favor de Anderson no tardaron en llegar, especialmente de las personas que : "Nunca uso sostén y recibo muchos comentarios desagradables al respecto, por lo que saber que Gillian Anderson ya no usa sostén es una información que me agrada mucho", escribía una fan, poniendo en valor la postura de la actriz.
"Si la actriz ganadora de dos premios Emmy y dos Globos de Oro, Gillian Anderson, dice que no más sujetadores, quiénes somos para estar en desacuerdo", añadía otro seguidor con cierto toque de humor.
¿La decisión de la actriz puede tener consecuencias en la salud? Depende de muchos factores: el tamaño del pecho influye mucho. Cuando hay mucho perímetro de pecho, se pueden producir más desequilibrios posturales y también en el tejido conectivo y en la musculatura. El tono muscular y la complexión también tienen mucho que ver en este sentido. Los desequilibrios pueden desembocar en dolor cervical, dorsal y lumbar. Llevar sujetador ayuda un poco a contrarrestar esa inercia y va a quitarle peso a la musculatura y a la columna. Sin embargo, si tuviésemos una buena estructura física y una musculatura fuerte, conforme al tamaño del techo, el sujetador no tendría por qué ser necesario.