En España, 33% de los divorcios se produce después del periodo vacacional de verano, según datos del Instituto de Política Familiar. Los psicólogos suelen decir que, si una pareja tiene una relación sana, después de la época estival será más fuerte. Sin embargo, si la relación sufre altibajos, los días de vacaciones serán determinantes y podrán pasar factura con la llegada del otoño.
Si estás en este proceso y tienes claro que tu pareja no tiene solución, hay maneras de que el divorcio o la separación no sean tan traumáticos. La mentora y terapeuta personal y de parejas Almudena Sos sabe cómo guiar una ruptura y qué pautas hay que seguir para no acabar devorado por el trauma. Uppers ha hablado con ella.
En tu experiencia, ¿es cierto que aumentan los divorcios en verano y tras las vacaciones?
Si bien es verdad que durante todo el año se producen divorcios, es una realidad que hay una estacionalidad marcada en fechas como las vacaciones de verano que hacen que aumente la cifra.
¿Nos puedes dar datos más concretos?
Durante el verano y en los días previos a coger las vacaciones, aumentan en un 30% las consultas relativas a problemas de pareja. En muchos casos se trata de infidelidades y, en otros, relativos a la preparación de vacaciones, tema que cuando se está bien en una relación, resulta motivo de ilusión; pero cuando la relación no está consolidada porque cada uno de los miembros arrastra su propia problemática en lo relativo a sentimientos, genera más inseguridades en la pareja y acentúa los miedos, sobre todo, de uno de los miembros.
¿Ves este tipo de comportamientos en consulta?
Una persona con la que estoy trabajando hace muy poco me llamó desde las Cataratas de Niágara en un mar de lágrimas porque estaban en sus primeras vacaciones juntos y ella no tiene claro si están en una relación o no, y se han cogido habitaciones separadas…
¿Los motivos de consulta cambian tras las vacaciones?
En ese caso, las consultas son más de tipo: “¿Qué puedo hacer para dejar de sufrir en esta relación?”. Es, entonces, cuando con la excusa de hacerse terapia de pareja, en el fondo lo que están buscando es una forma de crear un argumentario lógico que les ayude a romper con la relación y con todo el dolor que genera.
¿Qué factores potencian la decisión de un divorcio?
Hay varios: la falta de información sobre lo que ocurre en una relación de pareja. El no saber leer entre líneas lo que está pasando de verdad. La mayoría de las veces creemos que el problema de verdad es uno muy diferente al auténtico problema de base.
Algo también habitual es haber probado muchas cosas y ver que nada ha funcionado; centrarse en el otro en lugar de en uno mismo, y, por último, haber puesto muchas expectativas en un acontecimiento concreto o en la otra persona.
Desde tu punto de vista, como terapeuta, ¿qué beneficios tiene ir a terapia? ¿Tienen que ir los dos miembros de la pareja? ¿Las relaciones pueden resurgir?
Por supuesto, yo lo veo todos los días. De hecho el 90% de las veces es un solo miembro el que acude a pedir ayuda. El 85% de los procesos de terapia de pareja que hago, trabajo con un solo miembro de la pareja. El 99% de las veces es suficiente.
¿Por qué?
En una relación de pareja (bígama) hay tres entes: un miembro, otro miembro y la pareja en conjunto. Si uno de los miembros cambia el cómo vive lo que ocurre en la relación –pongamos que algo que dice o hace la otra persona deja de dolerle porque se ha trabajado… –, va a reaccionar de forma diferente, por lo que el segundo va a recibir un input también diferente que va a hacer que reaccione de manera distinta. La relación en su conjunto, por tanto, va a experimentar una transformación.
Si cada vez que tu pareja te dice que se va con sus amigos a jugar a tenis tú te cabreas y le montas un 'pollo' porque sientes que para él son más importantes sus amigos que tú y, de repente un día, (después de mucho trabajo) dejas de reaccionar así y empiezas a ocuparte de ti y ese día que se va al tenis tú aprovechas para irte al cine, a una coral o pasártelo en grande con tus amigas, vas a volver a casa en un estado completamente diferente y te va a dar igual que tu pareja vaya o no vaya con sus amigos a jugar a tenis.
La clave, entonces, es aceptar la realidad y organizar una alternativa
Cuando te diga que se va a jugar al tenis, tú vas a estar tan ocupada contigo que no te va a importar. Y en el 80 % de los casos, eso es súper contagioso además. He visto en muchas ocasiones cómo la pareja dejaba de ir a jugar a tenis porque quería irse con su mujer ya que se había convertido en otra persona con la que se sentía a gusto. Había dejado de ser la 'bruja' que le esperaba con la escoba tras la puerta.
¿Qué cinco consejos puede dar si alguien se divorcia tras esta etapa estival?
Para mí las cinco pautas fundamentales son:
1. Aprovechar esa experiencia vivida para extraer un aprendizaje profundo sobre uno mismo para que no se le vuelva a repetir.
2. Permitirte pasar por todas las etapas tras una ruptura. Dejar que fluyan todos tus sentimientos y experimentarlos.
3. No iniciar rápidamente otra relación, no como huida para dejar de sentir e ir corriendo. Permitirte sentir el dolor.
4. Ocuparte mucho de ti, de tu alimentación, de tu cuidado físico a pesar de que no tengas ganas, lleva tu cuerpo a los sitios.
5. Pide ayuda a un profesional para que puedas extraer un aprendizaje de esa situación.