Ayer finalizaba la agenda del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y hoy da comienzo a sus vacaciones tras unos días de final de curso político movidos y con la aprobación de medidas de última hora, como el plan de ahorro energético. Como viene siendo habitual, Sánchez y su familia darán comienzo a sus vacaciones en Lanzarote, en el palacio de La Mareta, donde permanecerán varios días, a no ser que la actualidad le obligue a reactivar su agenda.
El palacio de La Mareta fue mandado a construir a la orilla del mar a finales de los años 70 por deseo del rey Hussein de Jordania, que nunca llegó a hospedarse en la residencia, solo unos de sus hijos, que la utilizó durante su luna de miel. Fue en 1989 cuando el rey de Jordania cedió su residencia en Lanzarote, diseñada por el artista local César Manrique, al rey Juan Carlos I, que pasó a formar parte de Patrimonio Nacional.
No fue hasta 1992 cuando la residencia tuvo su primer huésped, el excanciller alemán Helmut Kohl, durante la cumbre hispano-alemana que tuvo lugar en la isla. Ese mismo año pasó unas semanas de verano en La Mareta el expresidente de la URSS, Mijail Gorbachov, junto a su esposa. José María Aznar, Rodrigo Rato José Luis Rodríguez Zapatero son otros políticos que también se han alojado en La Mareta.
Por su lado, la familia real española la visitó por primera vez en 1993, convirtiéndose en un refugio para ellos tras la muerte del padre del rey emérito, Don Juan, conde de Barcelona. Unos años después, en diciembre de 1999, la familia al completo regresaba a la isla para pasar las navidades. Los reyes eméritos, el entonces príncipe Felipe, las infantas Elena y Cristina junto a sus maridos y sus hijos, así como Pilar y Margarita de Borbón, también con sus familias, la hermana de la reina Sofía, Irene de Grecia, y la madre de Juan Carlos I, doña María de las Mercedes.
Las vacaciones navideñas comenzaron con normalidad. Todos posaron frente a la residencia a su llegada, incluida la madre de don Juan Carlos, que fue la última imagen que se tomó de ella junto a su familia. Tras celebrar el año nuevo, el día 2 de enero de 2000, la mujer fallecía mientras descansaba después de almorzar con toda la familia debido a una parada cardiorrespiratoria, poniendo un punto desagradable a las navidades en la isla.
Hubo que esperar unos años, hasta 2005, para que la familia real volviese a la residencia de La Mareta. Fueron don Felipe y doña Letizia los que en esa ocasión pasaron las navidades en Lanzarote junto a Leonor, nacida apenas unos meses antes, lo que convertía ese viaje en el primero para la ahora princesa fuera de Madrid.
Desde hace tres años, La Mareta es el primer destino de las vacaciones de Pedro Sánchez junto a su mujer e hijas. La residencia cuenta con alrededor de 10.000 metros cuadrados con una arquitectura canaria, especialmente diseñada para adaptarse al entorno lanzaroteño, algo de lo que se encargó el propio César Manrique.
El palacio, con acceso directo a la playa, está dividido en diez bungalós protegidos por altos muros que lo aíslan del exterior y de los curiosos que puedan rondar la zona. En el caso de la familia de Sánchez, suelen hospedarse en el edificio principal, que cuenta con dos dormitorios con terraza, dos baños, zona de descanso y una piscina privada. Además, en el jardín se encuentra un lago muy parecido al que se encuentra en los Jameos del Agua. También cuenta con un helipuerto, así como con pista de baloncesto o de tenis.