Volar es uno de esos superpoderes con los que todos, cuando éramos unos niños (y no tanto), soñamos. Sentirnos libres, recorriendo cielo cual pájaro o Peter Pan. Formas de volar hay, por ejemplo, tirándose en parapente. Otra forma es la tirolina, pura dosis de adrenalina mientras sentimos el viento recorrer nuestra piel. En España hay varias, pero una de ellas tiene el honor de ser la más rápida del mundo, solo apta para los que mejor toleran la adrenalina.
Se encuentra en la localidad de Fiscal, en Huesca, en pleno Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, en los Pirineos. La tirolina es, sin duda, una aventura. Son 400 metros de desnivel a lo largo de los más de 2 kilómetros de recorrido entre la salida y la llegada que se recorre solamente sujeto por un arnés desde donde disfrutarás del paisaje sintiéndote como un pájaro.
Esta tirolina está considerada la más grande y larga de España, pero también es la más rápida del mundo, llegando a alcanzar los 189 kilómetros por hora ahí subido. Tal es la velocidad que el recorrido puede hacerse hasta corto, en menos de dos minutos. Un trayecto rápido, pero en el que te dará tiempo a disfrutar de un paisaje espectacular y de las vistas de uno de los lugares más bellos de los Pirineos.
Además, es una experiencia que puedes compartir, ya que se puede saltar en pareja. Eso sí, siempre que el peso de ambos no supere los 150 kilos y tampoco haya una diferentes de peso mayor a los 40 kilos.
Cualquiera que se apunte a la aventura tendrá que hacerlo, además de con el arnés, con casco y gafas de protección. En cuanta al precio, vivir esta experiencia en solitario cuesta 40 euros, pero si encuentras a alguien con quien hacerlo, en tándem cuesta 79’20 euros. ¿Te has decidido ya a bajar a toda velocidad por la tirolina más rápida del mundo que está aquí, en España?