Así es la casa de Diana de Gales en la que puedes pasar unos días de vacaciones

  • Diana de Gales durmió en esta casa desde los ocho años hasta 1981, cuando se casó con el actual Carlos III del Reino Unido

  • Althorp House, la mansión de la familia Spencer, está dentro de una finca de 50 kilómetros cuadrados en el condado de Northamptonshire, entre Londres y Birmingham

  • 25 años de la muerte de Lady Di: ¿Dónde estabas cuando te enteraste?

Estamos de suerte. Charles Spencer ha decidido convertir en un alojamiento vacacional Althorp House, la increíble mansión en la que Diana de Gales, su hermana, vivió sus años más felices. La propiedad se encuentra en el bonito condado de Northamptonshire, entre Londres y Birmingham, y la familia Spencer está dispuesta a monetizarla en su totalidad.

Tras el trágico fallecimiento de Diana en un accidente de coche que tuvo lugar en París en 1997, tomaron la decisión de construir un mausoleo donde albergar sus restos en una pequeña isla dentro de un lago artificial de la finca. Se abre al público entre los meses de julio y septiembre previo pago (unos 30 euros por persona), aunque se sigue rumoreando que, en realidad, no es aquí donde descansa. Algunos medios aseguran que, tal como ella dejó por escrito, sus cenizas están junto a los restos de su padre en la cripta de los Spencer de la iglesia de Santa María la Virgen de la vecina aldea de Great Brington, a un paseo de media hora de Althorp House.

Una gestora de propiedades de lujo alquila Althorp House

Ahora, la gestora de propiedades de lujo Elysian Estates ofrece la posibilidad de celebrar por todo lo alto cualquier evento tanto en el interior de Althorp House como en su extensa finca de finca de 50 kilómetros cuadrados. Incluso es posible pasar una noche o tantas como se quiera en uno de sus 38 dormitorios. Propone celebrar una boda, un bautizo, una comunión, una puesta de largo; rodar un anuncio o una película; realizar una sesión fotográfica; presentar una nueva colección de moda… cualquier oportunidad que lo merezca.

Por el momento se desconoce el precio ya que la firma explica que se realizará un presupuesto en función de la petición y los servicios solicitados. Por su parte, la familia Spencer detalla que esta es una forma de compartir “la propiedad como nunca antes, mientras trabajamos para preservarla y protegerla para las generaciones futuras”.

Lo cierto es que alojarse en Althorp House, aunque solo sea una noche, puede ser una experiencia inolvidable donde vivir por unas horas a cuerpo de rey o de reina, porque incluso su interior alberga tanto numerosas colecciones como obras de arte de gran valor. Los inicios de la mansión no están ligados a la realeza, aunque todo evoca a que así fuera porque hoy está considerado “uno de los lugares más espectaculares, lujosos y exclusivos del Reino Unido”.

La casa la mandó construir en 1508 sir John Spencer, un hombre de negocios, criador de ovejas, sheriff y político que llegó a ser nombrado caballero por Enrique VIII en 1519. Su legado se ha trasmitido de generación en generación junto a títulos nobiliarios del más alto rango. El primero fue el de barón de Wormleighton. Más tarde, la familia fue sumando otros como el de condes de Sunderland, el de Marlborough y el de Spencer, al igual que el de vizcondes de Churchill y Althorp.

Todo empezó cuando Sir John Spencer compró las tierras de cultivo para después iniciar la edificación de la mansión en esa primera década de 1500. Todavía se sigue dedicando parte de la propiedad a usos agrícolas y de pastoreo donde, además, se decidió dejar de emplear pesticidas, herbicidas y fungicidas en esas tierras. Según publica la web Spencer1508.com ya están comprobando in situ los primeros resultados y están siendo muy satisfactorios.

Los tesoros de Althorp House

De puertas hacia dentro, la propiedad cuenta con una sala de archivos que recoge toda la documentación relativa a las piezas de valor, enseres, planos, construcciones... Además, un equipo de expertos en conservación y arqueología trabajan con dedicación exclusiva para que no se pierda nada y se mantenga en perfecto estado todo el legado familiar. Como ejemplo, dentro de la vivienda se reparte una de las mejores colecciones privadas de muebles, pinturas y cerámicas de toda Europa, que incluye cuadros de Van Dyck o de John de Critz junto a un Museo Chino con una colección de porcelanas y piezas orientales. Arte que es posible disfrutar en caso de alquilar Althorp House.

De puertas hacia fuera, se está recuperando una estación de tren privada de la familia Spencer, llamada Althorp Park, que se puso en marcha para que pudiera llegar hasta aquí la realeza y los jefes de estado y que estuvo operativa durante ochenta años. También se está recuperando un inmenso jardín amurallado de 1733. Aunque lo más llamativo ha sido el descubrimiento de una antigua villa romana bajo capas y capas de las tierras de labranza por parte de un grupo de arqueólogos. Es probable que todos estos proyectos necesiten incrementar su respaldo monetario y sea esta la causa por la que Althorp House se ofrezca en alquiler.

Cómo es Althorp House

En sus inicios, era una gigantesca casa de ladrillo rojo estilo Tudor con noventa habitaciones que se asemejaba a las grandes construcciones italianas. Ya en el siglo XVIII, cuando habían pasado 200 años desde su inauguración, la familia Spencer contrató al arquitecto Henry Holland su remodelación total y la mansión quedó tal como se encuentra en la actualidad.

Tras su fachada de piedra y grandes ventanales coronados por elementos franceses neoclásicos y de tradición local se abren grandes salones, una capilla, galerías para las colecciones de arte, comedores, salones de baile, una biblioteca decimonónica o una sala de billar de inspiración victoriana. Según destaca la publicidad de la web de la agencia gestora hay espacio para que duerman hasta 72 huéspedes, aunque solo algunos tendrán el privilegio de dormir en uno de los dormitorios especiales como el del Rey Guillermo, la Suite Georgiana o el de Queen Mary, donde se alojó la reina con Jorge V durante su estancia en Althorp House en 1913.

Otra de las alcobas ha quedado bautizada con el nombre de Diana de Gales porque en esta mansión vivió ella desde sus ocho años, entre el divorcio de sus padres en 1969 hasta 1981, cuando se casó con el que todavía era el príncipe Carlos.

En el caso de querer ofrecer una comida o una cena, hay capacidad para sentar en el gran comedor principal a 140 comensales, una estancia que se diseñó imitando el estilo del salón de baile del Palacio de Buckingham. En otras estancias interiores es posible organizar recepciones para 250 personas. Por supuesto, dispone de servicio las 24 horas, cáterin, mayordomo, limpieza y todo cuanto se pueda necesitar.

La mansión está rodeada por unos cuidados jardines al estilo de Versalles, el lago Round Oval con la isla donde se encuentra el pequeño templo de estilo dórico en recuerdo de Lady Di, un campo de croquet, otro de cricket y cientos de hectáreas donde organizar campeonatos de tiro con arco, equitación, diversos deportes… incluso se ofrecen clases de baile, paseos en helicóptero o retiros de salud. Dentro de la propiedad también hay pequeños pueblos que albergan granjas que son gestionados por la familia.

La finca, que tiene unos 50 kilómetros cuadrados, cuenta con frondosos bosques donde habitan gamos y muchas especies de animales, una casa señorial dedicada las actividades de cetrería, un estanque natural con garzas y todo tipo de aves y unos establos de inspiración italiana.

Estamos a la espera de experimentar de primera mano cómo es vivir en Althorp House para contársela “con pelos y señales” a los lectores.