Ni enclave ni exclave: periclave. En otras palabras, ni está del todo 'dentro' de España (aunque técnicamente sí), ni fuera de ella. No hay otro país que separe Os de Civís del resto del nuestro, pero ocurre que la única conexión terrestre con esta pedanía leridana es una pista terriza que atraviesa el collado de Conflent, a 2150 metros de altitud, que está gran parte del año cubierta de nieve. Un paso que, aseguran, solo querrían atravesar los suicidas o los locos.
Así las cosas, para llegar a Os de Civís primero hay que salir de España. Más concretamente, hay que cruzar la frontera con Andorra y una vez en el vecino Principado, ubicarse en la parroquia de San Julià de Loria para coger la CG-6 desde Aixovall. Seguidamente se llega a Bixessarri, un pequeño pueblo andorrano de 40 habitantes que se suele incluir en las rutas turísticas del entorno debido a su belleza. Y finalmente se entra a Os, es decir, nuevamente a España, cuya frontera es en este caso defendida por los carteles de prohibido el paso que pusieron los vecinos cuando, en la época del Covid, algunos intentaban cruzar a territorio español por allí.
Situado en la coma del Seturia y cuna del río Aós, Os de Civís posee el rango de entidad local dependiente de Valles del Valira, en Lleida y la mayoría de sus habitantes, 79 según el último censo, dependen en gran parte de los servicios del Principado. De hecho, la luz la provee una empresa española pero del recojo de basuras y limpieza de las carreteras de acceso, se encargan las instituciones vecinas. Los niños del pueblo también van al colegio en Andorra. La seguridad, eso sí, corre a cargo de los Mossos d'Esquadra... aunque para entrar en Os de Civís tienen que hacerlo escoltados por la policía andorrana.
Aunque lo 'natural' sería que Os perteneciera a Andorra, se dice que en tiempos remotos hubo una disputa entre pastores catalanes y andorranos, que saldó con una disputa a puño limpio entre los campeones de ambos bandos. Ganó el catalán, con lo que esas tierras pasaron a ser parte de la parroquia del Aós, ya en territorio español.
Aunque Os de Civís es el único 'periclave' español, no es el único en el mundo. Hay muchos casos parecidos, sobre todo en América, en las fronteras entre Canadá y EE. UU, entre Perú y Bolivia o entre Chile y Argentina.