Pocos paisajes hay más impresionantes que los que podemos encontrar en el norte de España. Montañas, ríos y costas ofrecen una experiencia única a quienes quieren conectar con la naturaleza. En ese sentido, una de las comunidades autónomas más disfrutables por sus parajes naturales, playas, sendas y precipicios escarpados es Galicia. De hecho, es aquí donde podemos encontrar el acantilado más grande de Europa.
En A Coruña, más concretamente en la sierra de A Capelada, entre el municipio de Cariño y el de Cedeira, se encuentran los acantilados de Vixía de Herbeira, comúnmente denominados acantilados de Herbeira. Se trata de los accidentes naturales de este tipo con mayor cota sobre el nivel de mar de toda la Europa continental. Con sus 613 metros de altura y una inclinación del 80%, estos acantilados dan la sensación de estar suspendidos sobre el Atlántico, ofreciendo a lo largo de sus 11 kilómetros de costa las vistas más sobrecogedoras de toda la zona.
En lo alto de los acantilados se alza la Garita de Herbeira, una pequeña construcción de piedra que ha resistido el paso del tiempo desde principios del siglo XIX. Erigida en 1805 como puesto de vigilancia costera, esta estructura fue construida por los vecinos de la zona para proteger la costa gallega de incursiones piratas y navíos enemigos. Hoy la función de esta caseta de piedra de 15 metros cuadrados, restaurada en 2003, es servir de refugio para aquellos que buscan resguardarse del viento mientras disfrutan de las majestuosas vistas. Incluso es utilizada como parque eólico y también funciona como zona de pasto para ganado.
Porque más allá de la Garita, el entorno de los acantilados de Herbeira es todo un espectáculo. A lo largo de la línea de acantilados no solo es posible disfrutar del paisaje, sino también de la visión de caballos pastando en libertad. El mirador do Cruceiro de Teixidelo, que tiene una placa en conmemoración del actor Leslie Howard (Ashley Wilkes en 'Lo que el viento se llevó'), la Praia de Area Negra de Teixidelo, en la Punta de la Mina, la Punta do Furado y la Fervenza de Calabanda, son algunos de los tesoros que encontraremos en el camino.
Para llegar a los acantilados hay que llegar primero a la Garita. Para ello, hay que conducir desde el municipio de Cedeira, en A Coruña, y a partir de ahí seguir por la carretera que lleva a San Andrés de Teixido. Al llegar al cruce con el municipio de Cariño hay que tomar la carretera en dicha dirección y después continuar durante 3 kilómetros hasta llegar al mirador.