Cuando se busca un destino mágico para disfrutar de la Navidad en España, La Alberca, en la provincia de Salamanca, sorprende al situarse de forma destacada como uno de los pueblos más deslumbrantes y cautivadores para estas fiestas. Es la localidad que se ha alzado como ganadora en 2023 del concurso que nombra al Pueblo de Navidad del Año, en el prestigioso concurso “Juntos Brillamos Más”, que está organizado por Ferrero Rocher. De esta forma, este pequeño pueblo de cerca de 1.000 habitantes se convierte por méritos propios en uno de los lugares más encantadores que podemos visitar durante la temporada navideña.
Situada en la Sierra de Francia, La Alberca es una localidad con la arquitectura típica de la zona, con casas de piedra y madera, y en la que cada rincón está impregnado de historia. Declarada Conjunto Histórico-Artístico en 1940, la localidad ha sabido preservar su esencia medieval, convirtiéndose en un referente del turismo rural en España. Cuando llega la Navidad, el pueblo se transforma, incorporando una decoración espectacular al paisaje, con cientos de guirnaldas y luces que no hacen más que resaltar sus balcones y calles empedradas, y creando un ambiente que parece extraído de un cuento de hadas.
Las tradiciones navideñas en La Alberca son profundas y se hacen notar casi en cada esquina. La plaza principal, con sus casonas porticadas y el emblemático crucero de granito, se viste de gala para la ocasión, ofreciendo un espectáculo visual único. La Navidad en este pueblo no se limita solo a la decoración, sino que también incluye belén viviente, mercados navideños y representaciones tradicionales que atraen tanto a turistas como a los habitantes de la zona.
La acertada iluminación navideña de La Alberca fue la clave para que coronarse como ganadora en el concurso “Juntos Brillamos Más”. Este certamen, que premia a los pueblos con las decoraciones navideñas más espectaculares, ha llevado a La Alberca a recibir miles de visitantes durante la temporada festiva, deseosos de disfrutar de la magia que inunda sus calles en tan señaladas fechas.
La competencia por este premio fue feroz, con finalistas como Celanova en Ourense y Benasque en Huesca, pero La Alberca logró destacar ser capaces de fusionar la belleza de su entorno natural con una iluminación que realza su carácter tradicional. Las luces en sus casas de entramado de madera, sus balcones adornados y la iluminación de su emblemática iglesia convierten a este pueblo en todo un descubrimiento para aquellos que quieran visitarla durante las noches de diciembre.
Además de su belleza arquitectónica y festiva, La Alberca es también un destino ideal para los amantes de la gastronomía tradicional. Durante las fiestas navideñas, los visitantes pueden degustar platos típicos de la zona como el hornazo, el jamón ibérico y guisos tradicionales, que hacen de la visita una experiencia completa para los sentidos.
La cocina local tiene plantadas sus raíces en la tradición castellana, aunque durante la Navidad incorpora platos específicos que solo se disfrutan en esta época. Por otra parte, los mercadillos navideños también son una parte esencial de la oferta de La Alberca, siendo posible adquirir todo tipo de productos artesanales locales, desde dulces típicos hasta adornos navideños hechos a mano.
A todo esto hay que sumar que además de sus mercados y eventos, el pueblo organiza talleres y actividades para niños, que incluyen desde la creación de adornos navideños hasta representaciones de cuentos populares. Al final todo suma puntos para que aquellos que se acerquen a La Alberca vivan una visita inolvidable, tanto para grandes como para pequeños.
España cuenta con muchos otros destinos que resulta igualmente encantadores durante esta época del año. Puebla de Sanabria, en Zamora, es otro de los pueblos recomendados, con su impresionante iluminación en el casco histórico y su patrimonio arquitectónico medieval, convirtiéndose de esta manera en un lugar fascinante para descubrir en esta época del año.
Asimismo, el pueblo de Peñíscola, en Castellón, es famoso por su mercado navideño junto al mar y su imponente castillo papal. Cada año, la localidad costera se transforma en un destino invernal con su particular toque mediterráneo, atrayendo a miles de turistas. No podemos olvidar tampoco a Guadalupe, en Cáceres, que goza de una arquitectura gótica y renacentista impresionante, a la que hay que sumar una decoración navideña a la altura, que realza su estatus como Patrimonio de la Humanidad.