Robert De Niro regresa al cine de la mano de Martin Scorsese. El actor se pone a las órdenes del director junto a Leonardo DiCaprio en ‘Los asesinos de la luna’. Está claro que el intérprete de 80 años tiene mucho que decir sobre su nueva película, pero la huelga de actores de Hollywood le impide poder hacer cualquier tipo de promoción de sus trabajos, aunque esté de estreno. Y si no puede hablar de su última película, lo hace de su familia, la misma que aumentó en la primavera pasada cuando se convirtió en padre de su séptimo hijo a los 79.
Fue en mayo cuando, durante una entrevista, la periodista le preguntaba por sus seis hijos. “Siete, acabo de tener un bebé”, le corrigió el actor, que acababa de ser padre con su actual pareja, Tiffany Chen, de 45 años. Aunque no ha dado demasiados detalles sobre su nuevo retoño, lo cierto es que De Niro ha concedido una entrevista a The Guardian en la que habla sin problema de su nueva paternidad a los 80.
Para el actor de ‘El Padrino’ o ‘Taxi Driver’ la paternidad sigue siendo una caja de sorpresas porque “nunca sabes lo que va a pasar, te sorprenden”, dice refiriéndose a sus hijos. No obstante, asegura que ahora a los 80 “no hay nada más fácil” que ser padre.
Y lo dice sabiendo su posición de privilegio. “Es lo que es. Está bien. Es decir, no me encargo de lo más duro. Estoy ahí, apoyando a mi novia. Pero es ella quien hace el trabajo. También tenemos ayuda, que es muy importante”, admite De Niro.
Lo que sí puntualiza es que disfruta mucho de su nuevo hijo porque “con un bebé es diferente que con mi hija de 11 años y mis hijos adultos o mis nietos, todo es diferente”. Sobre esto recalca como no habla de la misma forma con su vástago más pequeño que con sus hijos mayores, Drena tiene 51 años y es la madre de Leandro, el nieto del actor que falleció hace unos meses; Raphael 46; Aron y Julian, de 27; Elliot, de 25; y Helen solo 11 años, hasta ahora la benjamina de la familia, a quien De Niro describe como “bastante inteligente” a pesar de su juventud.