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Mike Tyson ha vuelto a protagonizar todas las portadas. Está previsto que el 20 de julio próximo vuelva a batirse en un combate profesional contra Jake Paul, un youtuber reconvertido en boxeador, en Texas y que se retransmitirá por una plataforma de pago. Un mes antes, el que fuera uno de los mejores del ring de pesos pesados de todos los tiempos, habrá cumplido 58 años y su rival solo tiene 27. Desde Uppers, hemos querido saber cómo es el lado íntimo de Mike Tyson y a qué se ha dedicado desde que abandonó el boxeo profesional en 2005.
Este próximo combate tal vez no se celebre tal como está publicitado. Para que el torneo sea calificado como “profesional”, Mike Tyson debe pasar un examen médico que incluye un electroencefalograma y un electrocardiograma, como impone la normativa en caso de que los luchadores tengan más de 36 años. Algunos expertos ya han dado su opinión y vaticinan que, con el historial de su carrera tras 56 peleas y dos derrotas por nocaut, un nuevo combate podría poner en riesgo su salud ya que podría sufrir una conmoción cerebral.
En caso de que el evento no sea catalogado como una pelea profesional, los contrincantes deberán usar guantes de boxeo de 16 onzas en vez de los tradicionales de 10 onzas, las rondas serán de dos minutos en lugar de durar tres y no se convocará a jueces oficiales que marquen el desarrollo del combate.
Mientras, Mike Tyson ha viajado a la ciudad de Cottonwood, Arizona, para entrenarse y ponerse en forma en una academia de boxeo que hace aproximadamente un año inauguró Maynard James Keenan, el vocalista y compositor de la banda musical Tool.
Se desconoce si su mujer Lakiha Spicer se ha mudado con él hasta que tenga lugar la pelea o se ha quedado en casa con los hijos que ambos tienen en común. La pareja se conoció en 2003, y tal como ha declarado el boxeador en más de una ocasión, Lakiha le ha dado la estabilidad que él necesitaba. Tyson se ha casado en tres ocasiones incluyendo esta última y en total ha tenido ocho hijos fruto de sus matrimonios u otras relaciones.
Con Lakiha empezó a salir en 2003 y se casó con ella en una capilla de Las Vegas en 2009. Un año antes habían tenido una niña, Milan, y después del enlace en 2011 nació Morocco que sería su octavo hijo. La boda fue una decisión repentina dos semanas después de sufrir uno de los sucesos que más ha marcado al boxeador a lo largo de su vida.
Otra de sus hijas llamada Exodus, nacida en 2005 después de mantener una relación con Sol Xochilt, una stripper y bailarina de Phoenix, murió con solo cuatro años en un trágico accidente doméstico, había quedado atrapada en una cuerda y en el hospital no pudieron hacer nada por la pequeña. A los 14 días de esa muerte tan horrible, Tyson contrajo matrimonio con Lakiha en la intimidad, sin una celebración de por medio, porque tan solo pretendían dejar constancia del enlace.
La vida de Tyson ha sido absolutamente desequilibrada incluyendo robos a mano armada en su juventud, prisión por varios delitos incluyendo una violación, juicios, relaciones constantes con modelos, cantantes y prostitutas VIP o consumo de drogas. Todo el dinero que ha facturado y los bienes que se ha ido comprando (coches, incluyendo una limusina con jacuzzi en su interior, mansiones gigantes o mascotas salvajes como una tigresa) también las ha ido perdiendo fruto de su inestabilidad, las demandas o los malos negocios en los que se ha aventurado. Actualmente parece que está bastante centrado en sus entrenamientos para ofrecer exhibiciones de boxeo, en su numerosa familia y en un negocio de distribución y venta de marihuana que le va muy bien.
En 2021, contaba durante una entrevista que antes de centrarse por fin llegó a consumir un psicotrópico vulgarmente conocido como veneno de sapo y que la experiencia fue como haber muerto para después volver a la vida. Se trata de una sustancia alucinógena, que se extrae del sapo Bufus alvarius que habita en el desierto mexicano, y su consumo induce a un estado alterado de la conciencia. También aseguró que se encontraba en un mal momento; ya consumía drogas como la cocaína y quiso probar otras cosas.
Mike Tyson nació el 30 de junio de 1966 en Nueva York, Estados Unidos, en un hogar muy humilde, roto y desestructurado. A los 12 años ya había sido detenido unas 40 veces por diversos hurtos y robo a mano armada hasta que le internaron en un reformatorio. Durante su estancia, Bobby Stewart, un exboxeador y preparador físico del centro, pidió al entrenador Constantine Cus D’Amato que se acercara al reformatorio a comprobar de primera mano la habilidad que tenía Tyson para boxear. Se quedó tan asombrado con su potencial que convenció a las autoridades penitenciarias y sociales para que le dejaran que se fuera a vivir con él y su mujer con la finalidad de entrenarle. Su premonición fue un acierto.
En noviembre de 1986 se convirtió en el campeón mundial de pesos pesados más joven de todos los tiempos. Tyson tenía 20 años y desde ese momento empezó a ganar una vez tras otra. Constantine Cus D’Amato ya había muerto de modo que y ano tenía un brazo seguro en el que apoyarse y que le sirviera de guía. En 1988, se casó con la actriz Robin Givens pero se divorciaron un año después. Incluso se cuenta, que cuando se estaban separando, el boxeador la sorprendió en la cama con un jovencísimo Brad Pitt. El actor reveló tiempo después que en ese encuentro llegó a temer por su vida.
De ahí en adelante Tyson seguía batiendo récords en el ring, sin embargo, todo lo vivido en su juventud y el ambiente del que se rodeaba “acentuaron su personalidad maniacodepresiva, por lo que estuvo permanentemente medicado durante varios años”. Además, igual que conseguía renovar su título de campeón del mundo se enfrentaba a un juicio tras otro, alguna de cuyas sentencias le obligó a ingresar en prisión en varias ocasiones.
En 1991 una modelo le denunció por violación, un hecho que él sigue negando; en 1997 le arrancó un trozo de oreja a un árbitro durante un combate y además de ser juzgado se le revocó su licencia de boxeador por un tiempo; golpeó a unos automovilistas tras verse involucrado en un accidente de coche; pegó a un árbitro que estaba intentando separarle de su contrincante en una pelea; o fue suspendido por consumo de marihuana en un control antidoping, entre otros acontecimientos.
Un año antes de meterse en la cama en un hotel con la modelo que le acusó de violación, Tyson fue padre de su primera hija a la que llamaron Mikey Lorna fruto de una relación con Kimberly Scarborough. Era el año 1990 y tenía 24 años. Su segunda hija nació en 1996, en 1997 se casó con la madre, Monica Turner, y enseguida llegó al mundo su tercer hijo Amir. Tras cinco años de matrimonio la pareja se separó tras múltiples infidelidades, lo que a Tyson le costó millones de dólares a la firma del divorcio.
En 2005, a pesar de todas sus victorias, de haber combatido en 58 ocasiones y haberse embolsado unos 300 millones de dólares, las deudas ya le habían sobrepasado. Decidió retirarse definitivamente tras ser derrotado por el irlandés Kevin McBride. Hace poco tiempo, y aparentemente felizmente casado con Lakiha Spicer, informó a la prensa de que tiene otro hijo más llamado Miguel Leon; puede tener unos 20 años y quiere ser boxeador como su padre.