Este verano además arranca con la nueva Ley de protección de los derechos y el bienestar de los animales que entró en vigor en septiembre de 2023. Uno de sus objetivos es “facilitar la convivencia de las personas con animales de compañía en espacios públicos” y la playa es el lugar de esparcimiento social por excelencia de los meses estivales. Cabe tener presente que la normativa que regula el dominio público marítimo-terrestre es la ley de Costas y que específicamente no prohíbe que los perros entren en las playas.
Son los ayuntamientos del litoral quienes han desarrollado una norma concreta al respecto y varía bastante de un lugar a otro. Dependiendo de cada arenal se prohíbe el acceso de los perros por falta de espacio o como medida de protección de la biodiversidad; se permite solo a determinadas horas; se acondicionan ciertas playas para ser compartidas por dueños y sus mascotas; o se destina una parte para un uso canino exclusivo.
Por su parte, lo habitual es que el ayuntamiento también obligue a que los perros estén vacunados y desparasitados y que lleven su microchip correspondiente con sus datos. Otro aspecto que recordar es que la nueva ley animal también obliga a que el perro disponga de un seguro de Responsabilidad Civil que cubra los daños a terceros.
Volviendo a las normas de los ayuntamientos, a veces, aunque permita el acceso a los arenales de los canes, existe la obligación de que siempre vayan atados o se prohíbe la entrada de las hembras que estén en celo o de los cachorros.
Lo que sí es común de este tipo de playas permisivas con los perros es una limpieza especial, la analítica de las aguas y la distribución de papeleras para excrementos. Algunas ofrecen un plus como las duchas caninas, el “pipi-can”, zonas para su esparcimiento, áreas de entrenamiento con aros y saltos e incluso piscinas y chorros de agua.
Para este verano de 2024, tras revisar por comunidades autónomas las playas que permiten la entrada de los perros, en Galicia destaca la provincia de Pontevedra con un mínimo de ocho arenales, A Coruña con cuatro y Lugo con dos. Asturias es una comunidad muy restrictiva con solo seis playas abiertas para perros de un total superior a las 200. Por su parte, Cantabria pone a disposición de los canes unas siete playas aunque algunas más abren en las últimas horas del día. En cuanto al País Vasco es la comunidad más restrictiva de todas y exclusivamente consiente el acceso en ciertos arenales tanto al alba como al caer la tarde.
Las playas del Mediterráneo disponen de unas normativas más abiertas. En Cataluña hay más de cuarenta que permite el acceso de los perros y por ejemplo en la playa de Llevant de la ciudad de Barcelona se han habilitado y acondicionado unos 1.500 metros cuadrados. Valencia y Alicante también disponen de bastantes arenales preparados para que disfruten los perros, lo mismo que Murcia. Por su parte, Andalucía es menos permisiva que las anteriores comunidades y de unos 600 kilómetros de costa y más de 250 playas, solo se puede acceder con perros en quince. En Baleares y en Canarias sucede lo mismo pues en contados arenales se ofrece la entrada libre con mascota.
Por el momento, la cifra de arenales españoles no supera los 130 y de todos ellos las mejores playas para perroseste2024 son las que siguen a continuación:
Playa de Bayas (Castrillón, Asturias): En 2016 se abrió el acceso todo el año a los perros en Playa de Bayas, que pertenece a la localidad asturiana de Castrillón, con fuentes, duchas y aseos. Se trata de una extensión privilegiada rodeada de naturaleza declarada monumento natural en 2002, sin explotar y sin edificios colindantes. Las mascotas pueden estar todo el día concretamente en la zona occidental casi junto a la playa Los Quebrantos de Soto del Barco.
Arenal del Jortín de Soto de la Marina (Bezana, Cantabria): En la franja derecha de la playa de San Juan de la Canal, que pertenece al pueblo de Soto de la Marina, se ha destinado un área para perros.
Playa de La Maza (San Vicente de la Barquera, Cantabria): También en 2016 se habilitó para mascotas la playa de La Maza, también conocida como la playa de los vagos, en uno de los arenales del municipio cántabro de San Vicente de la Barquera. Tiene una extensión de unos 160 metros, cuenta con papeleras, fuente para perros y una zona cercana de césped para el descanso.
Playa de La Rubina (Ampuriabrava, Girona): Años antes, en 2012, la localidad costera de Ampuriabrava, en Girona, inauguró en la Playa de La Rubina el primer arenal para perros en España con acceso todo el año. De naturaleza salvaje, sus dunas y sistemas lagunares propios de zonas de marismas están protegidos y no se han explotado con construcciones turísticas. Este arenal de dos kilómetros de largo, arena fina y suave oleaje, forma parte del Parque Natural de Aiguamolls de l’Empordà. Incluso en el camping localizado junto a la playa ofrecen menú para perros.
Playa de Llevant (Barcelona): La playa de Llevant en la misma ciudad de Barcelona desde 2016 dispone de un área habilitada para acceder con perros pero solo en verano. Son 375 metros de longitud y limita con el espigón de Selva de Mar y el de Rambla de Prim.
Playa La Balsa de La Arena (Deltebre, Tarragona): En este caso, la Playa de La Balsa de La Arena, del pueblo de Deltebre, en Tarragona, está acondicionada para perros todo el año pero no dispone de servicios. Son más de dos kilómetros de arenal virgen y aislado localizado entre la Playa de Riomar y la Playa de La Marquesa ubicados en el Delta del Ebro.
‘PlatjaCan’ de Playa de Pinedo (Valencia): La ‘PlatjaCan’ de la Playa de Pinedo al sur de la ciudad de Valencia solo permite el acceso con perros en verano en un horario de 9.30 a 19.30 horas. Se encuentra junto al Club Náutico, la desembocadura del Turia y el Puerto de Valencia. Tiene duchas, aseos y personal de salvamento y vigilancia.
‘Doggy Beach’ de la Playa de Agua Amarga (Alicante): Entre la ciudad de Alicante y Urbanova se inauguró en 2026 la Doggy Beach de la Playa de Agua Amarga de uso en verano con un servicio especial de limpieza, un “pipi-can”, dispensador de bolsas para recoger excrementos e incluso tumbonas y sombrillas para perros. Son 250 metros de longitud y 50 metros de ancho que vierten a un mar de oleaje moderado y fondo rocoso. El lugar es muy cómodo ya que dispone de aparcamientos y chiringuito con menú para perros.
Playa Canina de Torre del Mar (Torre del Mar, Málaga): La Playa Canina de Torre del Mar de Málaga es una de las más grandes con 4.000 metros cuadrados disponibles. También hay “pipi-can” y área canina de juegos con columpio, dos barras de equilibrio, zona de saltos, rueda, un túnel y dos áreas de descanso escalonadas. Como novedad, el personal de vigilancia cuenta con la ayuda de una patrulla canina especializada en salvamento en el agua.
Playa de Llenaire (Port de Pollença, Mallorca): Al norte de Mallorca, en el pueblo de Port de Pollença, se ha puesto a disposición de las mascotas la Playa de Llenaire, aunque no es un arenal, sino una ensenada de piedras y roca. Sin embargo, cuenta con un bosque de pinos que ofrecen sombra natural, muy reclamada en verano.
Playa de la Guacimeta, Playa Honda (San Bartolomé, Lanzarote): En la localidad de San Bartolomé, en Lanzarote, se encuentra habilitada para perros la playa de la Guacimeta que forma parte de Playa Honda.