Pisar el acelerador más de la cuenta sabemos que tiene sus peligros. Primero porque nos pone en peligro a nosotros, a quienes van en el coche y al resto de conductores y usuarios de la vía que se encuentran en la zona, y segundo porque si nos pillan con exceso de velocidad nos caerá una cuantiosa multa, pues suelen ser las más elevadas, además de una más que probable retirada de un par de puntos de carnet. Aunque en España estas multas tienen una cuantía concreta, en otros países las sanciones van en función del poder adquisitivo del infractor, como ocurre en algunos países europeos.
Sin embargo, algo muy diferente es lo que ha ocurrido en Savannah, una ciudad de Georgia, en Estados Unidos. Allí, a comienzos del pasado septiembre, un conductor fue multado por ir a 140 kilómetros por hora en una zona en la que el límite estaba a 90 km/h. Él esperaba la sanción, pero no la cuantía que finalmente se le notificó: 1’4 millones de euros.
No es ninguna broma. El propio conductor señalaba a Insider que sabía que iba a recibir una multa por exceso de velocidad por aquel día que, volviendo a casa, pisó más de lo debido el acelerador. Otra cosa es la cantidad, tan estratosférica que se llegó a poner en contacto con las autoridades para conocer si se trataba de un error.
Y no lo es, pero tiene truco. Al parecer, en este tipo de multas el sistema establece automáticamente una cuantía de base de 999.999’99 dólares a los que después se le van sumando otros agravantes y costes con el objetivo de lograr el importe más alto. Pero el conductor no va a tener que pagar tal cantidad, sino que se trata de una cifra con la que se aseguran que los infractores acudan al juzgado por superar en gran medida el límite de velocidad.
Allí, el juez determinará la multa exacta a la que se tendrá que enfrentar y abonar, que no superará los 1.000 dólares, a lo que se deben sumar los costes, unos 950 euros. Así que, pese a que la multa de 1’4 millones de euros es cierta, realmente no tendrá que pagar semejante cantidad. Eso sí, el susto se lo ha llevado y ya no pisará tanto el acelerador.